Espero con anticipación los días cálidos y soleados y tantas actividades que nos ayudan a sobrevivir el verano. Ya sea nadando, tomando un paseo por la mañana o corriendo cuando baja el sol y la temperatura está perfecta.

Aunque he vivido casi toda mi vida en Arizona, aún me sorprende lo rápido que aumentan la temperatura. Por eso es que durante el verano debemos estar cautelosos y ser aún más diligentes en protegernos del calor.

Después de varios días con temperaturas que sobrepasan los 90 grados, anticipamos ya la llegada del verano. Nuestros veranos traen temperaturas altas y calor extremo que nuestra comunidad debe tomar en serio.

El verano es mi temporada favorita. Sin embargo, disfrutar el verano también significa que debo estar al tanto de nuestras temperaturas extremas, especialmente cuando trabajo fuera de la oficina o de casa.

La mayor parte del año puedo hacer ejercicio al aire libre y cuando el clima es un obstáculo, hago mi ejercicio muy temprano en la mañana o hago actividades dentro del hogar o gimnasio. Aprovechen que amanece temprano y programen actividades como caminar, correr, trabajar en el jardín, ir de paseo y sacar a su mascota temprano durante la mañana.

Cada año, por lo menos 250 personas visitan una sala de emergencia a consecuencia de enfermedades relacionadas con el calor. Por lo menos 25 personas adicionales tendrán que ser rescatadas de emergencia mientras andan de paseo al aire libre debido a que se exponen al calor extremo. Y, desgraciadamente, cada año por lo menos una persona muere por estar expuesta al calor extremo.

Durante el verano, por lo regular alcanzamos nuestra temperatura máxima a las 4 p.m. Por lo tanto, es mejor que cambiemos nuestras rutinas y programemos nuestras actividades al aire libre antes del trabajo.

Aquí en Arizona, generalmente tenemos calor extremo con bajos niveles de humedad, lo cual puede causar deshidratación rápida. Durante el verano tomo más agua, aún cuando no siento sed, para asegurar que mi cuerpo esté hidratado.

Mantener nuestros cuerpos hidratados es clave. Cuando nos da calor, nuestros cuerpos se enfrían a través de la evaporación del sudor.

Sin embargo, durante días muy calurosos la humedad de nuestro sudor se evapora de manera rápida y no permite que nuestros cuerpos se enfríen.

Es importante saber que la temperatura de nuestros cuerpos se puede elevar a niveles peligrosos si no tomamos las precauciones adecuadas, entre ellas tomar agua y descansar fuera del sol.

Nuestro cuerpo nos advierte cuando hemos pasado mucho tiempo en el sol. Ya sea con un dolor de cabeza, náuseas, vómito, mareos, cansancio o sarpullido en la piel.

Si usted presenta cualquiera de estos síntomas, encuentre sombra o un lugar donde se pueda refrescar, beba agua y tome un descanso que le permita a su cuerpo refrescarse.

Tenemos suerte de vivir en este bello lugar y, como en otros lugares del país, hay peligros que debemos considerar. Para nosotros, estos peligros son las temperaturas extremas.

Sinceramente, espero que cada uno de ustedes disfrute de nuestro medioambiente pero que tome los pasos necesarios para protegerse del calor extremo.

Una muerte a consecuencia de enfermedades relacionadas con el calor es una muerte de más. Sea inteligente cuando salga al aire libre y recuerde que lo más seguro es programar sus actividades temprano en la mañana.

Finalmente, como ya lo mencioné varias veces, tome agua constantemente para combatir el calor y la deshidratación.


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El Dr. Francisco García es director del Departamento de Salud del Condado Pima.