Conforme se acercaba el 8 de marzo, pensaba, como cada año, en lo importante que es transmitir el mensaje de que no se trata de celebrarnos por el hecho fortuito de haber nacido mujeres sino de reflexionar sobre la lucha que tenemos que librar y lo mucho que falta para que se nos reconozcan todos nuestros derechos y se nos valore en términos equitativos con el hombre. Momento. El hombre, me repetí. Y me detuve ahí
Hoy, en el Día Internacional de la Mujer, hablemos del hombre.
Se me acumularon las ideas. Por un lado, en la historia de la inequidad, pensé, a ellos también les ha tocado su cuota, ciertamente menor.
En el juego de la asignación de roles y estereotipos, a los hombres les hemos reprimido las oportunidades de mostrar afecto, de revelar sus sentimientos, de tener miedo, de criar a sus hijos, de recibir una flor.
Bueno, pero de lo que me gustaría hablar hoy, me dije, es de los hombres que se han unido a nosotras en la lucha por la equidad de género. De los hombres feministas.
Y pensé entonces en los de mi generación y más arriba. En los que crecieron oyendo que los hombres no lloran; que las mujeres planchan; que las mamás tienen derecho a trabajar, pero sin descuidar a sus hijos ni a su marido, etcétera, etcétera, etcétera, y que aún así han ido modificando su forma de pensar y actuar.
Esos hombres merecen nuestro reconocimiento y gratitud.
Los hombres que se han sumado a la lucha para que se reconozcan los derechos de las mujeres son hombres feministas, y hoy es también su día, me dije.
Ellos y nosotras estamos educando a los más jóvenes, a los que están creciendo con menos apego a los estereotipos, con más libertad y aprecio por la equidad. Wait! Eso significa que algo estamos haciendo bien, ¡y lo estamos haciendo juntos!
Me detuve de nuevo. Y me regresé tantito. ¡Es todo parte de lo mismo!
Si hablo de lo que como sociedad les hemos impuesto a los hombres, hablo también de lo que como sociedad nos han quitado a las mujeres.
Y venimos a parar al mismo punto, al verdadero valor del Día Internacional de la Mujer, que bien podría llamarse el Día Internacional de la Equidad de Género.