Por Crystal Bedoya
La EStrella de Tucsón
A los 22 años de la muerte de César Chávez, las películas siguen conmemorando su memoria y relatan las luchas que encabezó por los derechos de los trabajadores agrícolas.
Una película se estrenará en Tucsón la próxima semana centrándose en la disputa de Chávez durante su último ayuno.
El Instituto de Cine Hanson de la Universidad de Arizona presentará la película “Cesar’s Last Fast”, la cual se enfoca en el desarrollo de Chávez y los sacrificios que hizo mientras formó parte de la Unión de Trabajadores Agrícolas (UFW, por sus siglas en inglés), el martes 17 de febrero en The Screening Room, 127 E. Congress St.
Richard Ray Pérez, director de cine y productor de Los Ángeles, California, revela momentos íntimos de Chávez durante su ayuno de 1988.
Cuando era niño, el director se dio cuenta de la importancia de unirse a la causa. Durante sus años escolares, estudiantes universitarios visitaban a su grupo. En esa etapa de su vida, Pérez se dio cuenta de algo que cambió la forma en la que veía el trabajo de campo.
“Estábamos almorzando, y parte de ese almuerzo eran cocteles de fruta... y me di cuenta cuando uno de los estudiantes universitarios empezó a comer la ensalada de fruta y comenzó a remover las uvas”, dijo Pérez. “Tenía mucha curiosidad. Entonces le dije: ‘¿cómo es que no estás comiendo las uvas?’”.
El estudiante universitario le explicó a Pérez el trato terrible que recibían los trabajadores agrícolas, quienes permanecían condenados al maltrato o se arriesgaban a ser despedidos. Al darse cuenta de la verdad, el padre de Pérez, un trabajador del campo, sometió a sus hijos a vivir la lucha que enfrentaban los que formaban parte del sindicato. Pérez y su familia pronto se unieron a las huelgas frente a los supermercados en su ciudad natal de San Fernando, California, para impedir la compra de uvas.
“La experiencia del trabajador agrícola no era sólo una parte de la experiencia de mi familia”, añadió Pérez. “Participé en un movimiento histórico, y esa es la conexión esencial que tengo con esta historia.”
La película contiene una mezcla de testimonios de personas cercanas a Chávez, como Dolores Huerta, cofundadora del Sindicato, su difunto hermano, Richard Chávez, y muchos otros que apoyaron la causa. A lo largo del documental, material de archivo de las huelgas, los discursos y escenas de sus 36 días de sólo beber agua muestran otro lado de Chávez.
Al incorporar su fe durante la organización de los trabajadores del campo, Chávez fue visto como un hombre fuerte, incluso después de sus ayunos.
Victoria Westover, directora del Instituto Hanson, asistió a un seminario en San Francisco el verano pasado, donde tuvo la oportunidad de conocer a Pérez, quien fue invitado para presentar y discutir cómo se elaboró el documental. Westover pronto se dio cuenta de que el documental sería una excelente opción para el lanzamiento de DocScapes, una serie de documentales excepcionales.
“Proporciona una perspectiva diferente sobre César Chávez. Lo presenta más de aspecto espiritual que de su obra que sale de su enfoque espiritual. Esa no era la forma habitual en que César Chávez era presentado,” dijo Westover.
El Instituto también tendrá un taller para el público antes de la presentación de la película acerca de la dinámica de la cinematografía, con Pérez como invitado. Laurel Bellante, una estudiante de doctorado de la Escuela de Geografía y Desarrollo en la UA, formará parte del taller.
“Él hace un trabajo realmente increíble en la integración de ambas entrevistas a través de las personas que todavía están vivas con el contenido que claramente fue hecho décadas antes”, dijo Bellante. “Esa es una de las cosas que quiero aprender. Cómo se acercaba a la recopilación de esos materiales, y para acceder a ellos”.
Bellante, quien actualmente está trabajando en una tesis sobre el maíz y el cambio climático en Chiapas, México, quiere incorporar historia digital como la cinematografía en su trabajo.
Pérez está ansioso de presentar el documental a estudiantes universitarios para iniciar la conversación en torno al legado de Chávez.
“Necesitamos los movimientos sociales, especialmente en nuestra comunidad. Nos enfrentamos a enormes desafíos alrededor de las disparidades económicas y la inmigración “, dijo Pérez. “La historia de César y la historia del movimiento que fundó y dirigió con Dolores Huerta es un modelo y también una lección de cómo podemos lograr algo de justicia social real en este país actualmente”.



