Cuatro meses después de su ultimo juego con los Arizona Wildcats, César Salazar volverá a estar en el terreno con los Gatos. Pero no estará jugando con sus ex compañeros, sino contra ellos.
Y estará jugando con el equipo al que le echába porras de niño y con el que siempre anheló jugar.
“Significa mucho para mí. Crecí viendo a ese equipo”, dijo Salazar. “Es un equipo al que he visto desde que era chiquito. Ahora, vestir sus colores, es muy especial. Podré, espero, jugar frente a todos mis amigos y familia”.
Salazar, quien dejó al equipo de Arizona después de tres temporadas porque fue seleccionado (drafteado) por los Houston Astros en la séptima ronda, se unió a Naranjeros de Hermosillo en el verano. Y los Naranjeros se enfrentan a Arizona el jueves en el primer día de la Fiesta Mexicana de Beisbol, que se celebrará del 4 al 7 de octubre en el Estadio Kino.
Es la primera vez, en ocho años de la Fiesta tucsonense, que Arizona participará.
Y dado que Salazar lleva apenas unos meses fuera de los Wildcats, cree que podrá ayudar a los Naranjeros a vencer a Arizona.
“O sea, conozco las estrategias de Arizona, así es que no nos tomarán desprevenidos”, dijo el receptor Salazar. “Eso es seguro”.
De Hermosillo
Salazar nació y creció en Hermosillo, de donde se vino a Tucsón a los 16 años. Egresó de Sahuaro High School y jugó para Arizona. Su casa familiar, en Hermosillo, está a 10 minutos del Estadio Sonora, donde ahora juegan los Naranjeros.
Así es que, cuando fue seleccionado por los Astros, Salazar sabía exactamente a dónde debía ir.
“Conocía a algunas personas de ahí”, dijo Salazar. “En cuanto fui drafteado, me tomaron. Es más fácil estar con ellos porque soy de Hermosillo, ellos pueden draftearme automáticamente, no tienen que esperar. En cuanto fui drafteado, ellos también me llamaron”.
La semana pasada, Salazar viajó a West Palm Beach para una liga instruccional de dos semanas. Pero después de eso se unirá a los Naranjeros. No sabe aún por cuánto tiempo estará con el equipo de su ciudad natal.
“Hasta ahorita no hay restricciones de los Astros”, dijo Salazar. “Así es que, con suerte, (estaré) toda la temporada”.
El encuentro entre Naranjeros y Arizona, que es uno de los dos juegos del día inaugural de la Fiesta, será el primer juego de Salazar con el equipo de Hermosillo.
Y aunque ese debut no será en Hermosillo, Salazar dijo que jugar en su primero juego con el brilloso uniforme naranja en la que es su segunda casa es muy emocionante. Es un día que ha estado esperando.
Y también espera volver a ver a sus entrenadores y ex compañeros.
“Siento mariposas nomás de pensarlo: jugar con el equipo que vi mientras crecía y contra el equipo que me ha dado hasta ahora los mejores tres años de mi vida”, dijo Salazar “No podía ser mejor. Es algo especial que nunca olvidaré”.
Pero aún cuando pudiera parecer que su carrera ha cerrado un círculo, Salazar apenas comienza.
Su viaje por el béisbol no terminará mientras no llegue a las Grandes Ligas, Por ahora, está listo para aprender de la Liga Mexicana del Pacífico, hacer repeticiones, competir y seguir trabajando para llegar a las Mayores, con suerte con los Astros.
“Ser un cátcer establecido en la MLB. Ese es el objetico”, dijo Salazar.
