Ethan Hunt (played by Tom Cruise) again defies the odds to save the day in “Mission Impossible: Rogue Nation.”

La Guerra Fría, que abarcó la segunda mitad del siglo XX, no sólo creó un miedo permanente en los habitantes del mundo, quienes estaban conscientes de que las dos poderosas potencias involucradas (La U.R.S.S y EU) podían desatar una confrontación de terribles consecuencias en cualquier momento.

Y es que este enfrentamiento político mundial fue también fuente de inspiración de innumerables libros (los de Clancy), cómics (todos los de superhéroes), películas (las del 007), y series de televisión, como “Mission: Impossible!”, de la cual hablaremos en esta ocasión, aprovechando el estreno de la quinta entrega de la popular franquicia cinematográfica producida y protagonizada por Tom Cruise.

Recordemos que fue Brian De Palma el responsable de llevar a la pantalla grande la primera adaptación al cine de esta serie de espionaje y de misiones ultra secretas que, entre sus varios atractivos, estaban el uso de tecnología de punta, la rotación del elenco y, sobre todo, la pegajosa música de Lalo Schifrin.

Luego de varias cintas, unas buenas y otras no tanto; del regreso de parte del elenco original o la incorporación de sangre nueva a las secuelas; del involucramiento de famosos directores de acción (John Woo, J.J. Abrams y Brad Bird en la segunda, tercera y cuarta parte, respectivamente), Tom Cruise, con todo y sus 53 años, pone en claro que es aún uno de los imanes de taquilla más exitosos en la actualidad.

El director elegido para la quinta entrega, marcada con el distintivo “Rogue Nation”, es Christopher McQuarrie, quien recibió el visto bueno de Cruise luego de haber sido dirigido por él en “Jack Reacher” (2012), una cinta de acción que también sirvió como ejercicio de mantenimiento para que el astro mostrara su todavía firme condición física.

“Mission: Impossible — Rogue Nation” (2015) es un capítulo un poco diferente a los demás, pues aunque cuenta con la participación del siempre leal Luther Stickell (Ving Rhames), el confiable y patiño de la saga Benji (Simon Pegg) o el regreso de William Brandt (Jeremy Renner), el posible sucesor de Cruise, el guión contiene, sin duda, una dosis mayor de dramatismo que sus predecesoras, seguramente siguiendo el ejemplo de “Skyfall” (Sam Mendes, 2012), pues no hay que olvidar que el 007 ha sido su modelo a seguir y competencia directa desde su génesis.

La trama de “Rogue Nation” tiene como elemento importante el posible desmantelamiento de la Impossible Mission Force (IMF) a manos de un prominente personaje de la CIA (Alec Baldwin); la acción podría estar relacionada con la presencia de una peligrosa organización conocida como the Syndicate, un grupo multinacional que tiene una oscura y peligrosa agenda que Hunt y su equipo intentarán descifrar.

Será así como, en medio de las secuencias de acción más espectaculares con el camaleónico Ethan Hunt en medio de ellas (se ha presumido que Cruise quiso realizar algunas él mismo), persecuciones en veloces motocicletas y potentes autos, uso constante de armas modernísimas y planes cuidadísimos con las estrategias más exquisitas, estos renegados miembros de la IMF harán hasta lo imposible por cumplir con su deber en contra del peligro que representan los enemigos modernos: las peligrosas corporaciones y los bancos sin escrúpulos.

Completan el elenco Rebecca Ferguson, como la bella y misteriosa agente Ilsa, Sean Harris y America Olivo.

Hasta la próxima.


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