A pesar de ser una empresaria exitosa por más de 40 años, Carlotta Flores aún no está lista para dormir en sus laureles.
“Todos los días hay cosas que no me gustan y cosas que me encantan”, dijo Flores. “Todos los días, cuando hago algo que le da placer a otra persona, también me da a mí, pero todos los días hay algo que aprender”.
La propietaria de El Charro Café fue nombrada como una de las empresarias latinas más destacadas de Tucsón por Cox Business, al lado de Laura Paredes Oldaker, cofundadora de By Your Side Senior Care.
Lo que Cox Communications, en conjunto con La Estrella de Tucsón y la Cámara de Comercio Hispana, buscó entre las empresarias latinas fueron sus contribuciones sociales, económicas o culturales significativas a la comunidad hispana.
Flores y su esposo Ray operan el negocio —el restaurante de comida mexicana más viejo en el país administrado por la misma familia— desde 1972, cuando tomaron las riendas de manos de su tía abuela Mónica Flin.
Flin abrió el restaurante en 1922, en el 140 W. Congress St. No fue hasta 1968 cuando El Charro Café se mudó a su ubicación actual en el 311 N. Court Ave., a una propiedad que fuera hogar de la familia Flin.
Flores, nativa de Tucsón e hija de padre mexicano y madre estadounidense, vio a sus hijos crecer dentro del negocio, y dijo que no podría haber obtenido el éxito sin sus seres queridos.
“Estoy aquí por la ayuda y apoyo de mi familia”, señaló. “Sin ellos uno no tiene ni la fuerza ni el ánimo ni el placer de hacer algo”.
El día de hoy, la familia Flores es dueña de cinco restaurantes en el área de Tucsón, incluyendo sucursales de El Charro Café y Sir Veza’s Taco Garage, además de Hecho en Vegas, un restaurante de alta cocina mexicana ubicado en el Hotel y Casino MGM Grand en Las Vegas, y de un Sir Veza’s en el aeropuerto de Phoenix.
El mes pasado, la familia dio un paso más para llevar un poco de Tucsón al resto del país con el lanzamiento de la línea de burritos Carlotta’s Kitchen. Los antojitos están en venta en 50 sucursales de la tienda de autoservicio 7-Eleven en el sur de California como parte de un programa piloto, con planes a que más tiendas ofrezcan el producto a futuro.
Para Flores, el seguir innovando es parte importante de tener éxito como empresaria, pero señaló que la ayuda de otros es vital.
“Uno siempre tiene que tener mentores, tomar consejos y platicar con gente de negocios”, dijo. “Hay que participar en grupos de negocios y no tener miedo de hacer preguntas. Es posible que no tome uno todo lo que dicen, pero siempre hay algo positivo”.
Y sobre todo, dijo, nunca se le debe de olvidar a uno decir gracias.