Poco antes de que el gobernador Doug Ducey anunciara que los ciudadanos deben permanecer en casa hasta el 15 de mayo y que los pequeños comercios empezarían a reabrir antes, las alcaldesas de Tucsón, Phoenix y Flagstaff pidieron al mandatario mantener cerrados los negocios no esenciales.
Una vez conocida la medida del mandatario, Regina Romero, alcaldesa de Tucsón, aplaudió la decisión del Gobernador y reiteró su llamado a la mesura y a la inclusión de las voces.
"Me anima la extensión del Gobernador Ducey de su Orden Ejecutiva ("Quédese en Casa...) y aplaudo su enfoque medido", dijo en un comunicado de prensa. "Estas son decisiones difíciles pero necesarias que ningún funcionario electo disfruta tomar".
Romero insistió, como lo había hecho horas antes junto con autoridades de otras ciudades y del Condado Pima, en que es "fundamental" que la reapertura sea gradual y siga las pautas establecidas por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y por el Departamento de Salud del Condado Pima.
"Hasta la fecha, Arizona y el Condado Pima no han cumplido con este criterio", dijo.
Romero afirmó que también le "duelen" todos los días que las empresas locales permanecen cerradas y los trabajadores sin empleo, pero subrayó que la reapertura de la economía debe seguir los consejos de los expertos en salud.
Y puesto que "la Orden Ejecutiva evita que los municipios tomen medidas a nivel local", dijo Romero, "le sugiero al Gobernador Ducey que busque el apoyo de los Alcaldes, Alcaldesas y funcionarios locales que están al frente de esta pandemia.
"Espereo con ansias colaborar con el Gobernador Ducey", dijo Romero.
LLAMADO DE TUCSÓN, PHOENIX Y FLAGSTAFF
Horas antes del anuncio del gobernador el miércoles, las alcaldesas Kate Gallego, de Phoenix; Coral Evans, de Flagstaff; y Romero, de Tucsón, dijeron en una declaración conjunta que se requerían dos semanas con las cifras del coronavirus a la baja para reabrir la economía de forma segura.
"El estado debe poder proporcionar datos claros que demuestren que hemos logrado una disminución de 14 días en los casos de COVID antes de que la economía comience a reabrir".
Sin embargo, la nueva orden ejecutiva del Gobernador indica que entre el lunes 4 y el viernes 8 de mayo ciertos pequeños negocios pueden volver a operar. Para los restaurantes se contempla que "en el mejor de los casos" vuelvan a recibir a comensales desde el 12 de mayo, pero siguiendo nuevas pautas de precaución. Los bares que no incluyen alimentos no estarían considerados aún para la reapertura.
Anuncia ciertas modificaciones
Las alcaldesas también habían advertido que se requieren más pruebas de coronavirus disponibles para la población. En ese sentido, aplaudieron el anuncio del gobierno estatal de un 'bombardeo' de 60,000 pruebas a aplicar en los tres siguientes fines de semana en cuatro condados de Arizona.
Las lideresas locales también señalaron que Arizona debe aprender de la experiencia de otros estados.
"Hemos visto otras comunidades que reabrieron demasiado pronto y pagaron el precio tanto en salud pública como con un segundo cierre económico", dijeron las presidentas municipales. "No queremos que eso suceda en Arizona".
Romero, Gallego y Evans mostraron preocupación por que una apertura acelerada pudiera afectar especialmente a los socorristas de sus respectivas ciudades. "Cuanto más tiempo tengan para prepararse, más posibilidades tenemos de mantener a nuestros policías, bomberos y residentes seguros y saludables", dijeron.
PREOCUPACIÓN EN EL CONDADO PIMA
En un documento por separado, el presidente de la Junta de Supervisores del Condado Pima, Ramón Valadez, también se había unido a Regina Romero en el llamado al gobernador a no suavizar las restricciones ordenadas en marzo en el estado.
"El Condado Pima y la Ciudad de Tucsón estamos unidos en nuestra preocupación por relajar las restricciones y abrir nuestra economía en este momento", dijeron Romero y Valadez en un mensaje conjunto el miércoles 29 de abril, horas antes del anuncio del gobernador.
Los funcionarios locales alentaban a Ducey "a dar a los condados y jurisdicciones locales la flexibilidad para actuar a nivel regional, si no quiere extender su orden ejecutiva" de permanecer en casa.
El Departamento de Salud del Condado Pima emitió en días pasados una serie de pautas basadas en las recomendaciones de los CDC sobre en qué condiciones sería seguro comenzar una reapertura de la economía en fases.
En el Condado Pima se han confirmado 1,215 casos de COVID-19 y 80 muertes relacionadas en el área metropolitana de Tucsón.
En su documento, el condado incluyó como factores necesarios la disminución de los casos positivos de COVID-19 durante 14 días consecutivos, pruebas generalizadas y suficiente equipo de protección personal para los socorristas y los trabajadores de la salud. "Instamos a tener una gran precaución en cualquier relajación" de las normas, dijeron Romero y Valadez.