El administrador adjunto y ex director médico del Condado Pima, Dr. Francisco García, una voz autorizada en el tema del desarrollo del COVID-19 en el condado, habló la semana pasada en entrevista con La Estrella de Tucsón de la situación actual de los contagios de coronavirus, la ocupación hospitalaria, pruebas, escuelas, el toque de queda, muertes y medidas de prevención.
Niveles críticos
Dr. García: Nosotros platicamos con los hospitales dos veces al día para estimar cuántas camas tenemos disponibles para cuidados intensivos y cuidado primario. Y sí: estamos llegando a una temporada en que estamos teniendo números bastante bajos de camas disponibles (dijo el 30 de noviembre). Imagínate un accidente automovilístico, por ejemplo un choque de un autobús, podría llevar a esas personas a tener que ser trasladadas a otras ciudades fuera de Tucsón si no tenemos esa capacidad aquí en el condado.
Estamos a niveles críticos. Nos gustaría tener más de 40 o 50 camas de reserva, porque nunca se puede prever lo que puede pasar.
Nota: El lunes 7 de diciembre, Arizona tenía solo el 10% de sus camas de terapia intensiva disponibles, una cifra que se mueve constantemente.
¿Está funcionando el cubrebocas?
Dr. García: En el Condado Pima los ciudadanos comenzaron a usar el cubrebocas a mediados de junio. Es un gran número de personas que se han formado ese hábito de usar el cubrebocas de manera correcta, pero lo que está pasando es que, desafortunadamente, cuando uno está con sus amigos, con la familia, en grupos pequeños, se nos olvida que de todas maneras tenemos que usarlo.
Es precisamente en esos instantes, en esos grupos pequeños, cuando nos podemos infectar.
También hemos visto escenas así en bares o restaurantes, donde hay agrupaciones grandes de personas, y es ahí donde se corren riesgos. Es por eso también que hemos estado tratando de implementar un toque de queda voluntario desde la semana pasada (por parte del Condado Pima, independiente del toque de queda obligatorio de la ciudad de Tucsón que inició el 4 de diciembre, de 10 p.m. a 5 a.m.), con la esperanza de que eso nos ayude a modificar nuestro comportamiento.
Es entonces que bajamos la guardia, cuando estamos con los amigos y la familia o que vamos a la carne asada; es entonces que dejamos de usar el cubrebocas y descuidamos el distanciamiento físico entre una persona y otra; incluso a veces vamos a esos eventos cuando nos sentimos un poco enfermos. Eso es precisamente lo que estamos tratando de evitar.
Los decesos han sido menos que en el verano. ¿Estamos mejor preparados o es solo por el tiempo que toman las muertes en darse y registrarse?
Dr. García: Son las dos cosas. Recordemos que donde pegó más duro al principio fue en las instituciones que cuidan a personas ancianas; estas instituciones fueron afectadas profundamente cuando empezó esto, en abril, mayo; ahí tuvimos un número de defunciones muy elevado. Después de eso trabajamos con muchas de esas instituciones para mejorar el control de infección, el entrenamiento, el rastreo de los casos, y no solo en los empleados, sino también en los pacientes.
Esa fue una estrategia sumamente efectiva, aunque seguimos teniendo estos retos de vez en cuando con una u otra institución.
Lo que estamos viendo ahora es que los casos en este pico son relativamente más jóvenes y relativamente más sanos, y por eso están requiriendo menos hospitalización y está habiendo menos defunciones hasta este momento. Eso no nos debe dar la oportunidad para ser menos estrictos en nuestra prevención.
¿Está creciendo el número de casos asintomáticos?
Dr. García: El número de casos asintomáticos es relativamente fijo. Esos son los casos que tratamos de rastrear cuando exhortamos a la población a hacerse la prueba de coronavirus. Eso es con la idea de identificar esos casos asintomáticos, para que esas personas se queden en casa.
Es súper importante que si una persona va a hacerse la prueba, tenga el compromiso de: A) quedarse en casa hasta conocer el resultado de la prueba, y B) permanecer en casa si la prueba resultó positiva durante la duración del aislamiento, que es de 10 días.
¿El presentar o no síntomas tiene que ver con la capacidad de transmitir el virus?
Dr. García: Las personas que son sintomáticas son más eficaces para trasmitir el virus, especialmente los dos días antes de que desarrollan sus síntomas; es cuando hay mayor propensión de contagiar a alguien más, aunque claramente habrá personas que no van a tener ese problema.
Pero todos nos debemos comportar como si todas las personas con las que tenemos contacto pudieran estar infectadas. Si usamos ese criterio, si tenemos eso en mente, vamos a resguardar nuestra salud y la de nuestra familia.
¿En qué casos se recomienda hacerse una prueba y cuándo?
Dr. García: Si una persona tiene síntomas de infección por coronavirus; si se ha estado en contacto con alguien que haya desarrollado una infección por coronavirus; si una persona vive o convive con alguien que está infectado, todos ellos son el grupo que debe considerar hacerse la prueba.
Si uno está asintomático es cuando más se recomienda esperar hasta 5 días para hacerse la prueba, porque es un periodo de tiempo para que se manifieste en el cuerpo el nivel de virus necesario para ser detectado, pero puede ser (que se manifieste) de entre 3 a 6 días después del contacto.
¿La vacuna tendrá un costo para la ciudadanía? ¿Qué pasará con quienes no tienen seguro médico?
Dr. García: En este momento estamos planeando una estrategia para que no tenga ningún cargo adicional para cualquier persona que sea elegible para la vacuna.
¿Cómo está afectando la pandemia a los niños?
Dr. García: El grupo de niños es un grupo muy interesante. Entendemos algunas cosas:
Primeramente, que las infecciones entre los niños no están ocurriendo en las escuelas y ciertamente no en los salones. Sí vemos infecciones en eventos sociales, eventos atléticos, asociados con este tipo de equipos y actividades. Es en esas agrupaciones donde ocurren las infecciones que vemos en los niños. Eso y también en su propia casa. Por eso les digo que es importante no bajar la guardia, aun cuando uno está con su propia familia, precisamente para proteger a todos.
¿Está de acuerdo el condado con las sugerencias del equipo de análisis de modelado de COVID-19 de la Universidad de Arizona: cubrebocas obligatorio en todo el estado y tres semanas de confinamiento?
Dr. García: Cualquier cosa que podamos hacer para reducir los contagios sociales es una cosa muy importante. Hay cosas que nosotros tenemos la facultad legal de requerir y otras que no. Ese tipo de medidas solo las puede requerir el gobernador.
La orden de que todos se queden en casa solo la puede hacer, desde nuestro punto de vista, el gobernador, porque eso tiene consecuencias muy severas para las personas, puesto que la mayoría de nuestra gente no puede trabajar en forma remota.
Eso se debe tener en mente. Pero sí, cualquier cosa que podamos hacer para reducir las interacciones sociales, para reducir el riesgo asociado con estas interacciones, es bueno.
¿Esa fue la razón por la que el Condado de Pima propuso de un toque de queda voluntario?
Dr. García: No fue una propuesta sino que ordenamos un toque de queda voluntario. La otra cosa que hicimos también fue cancelar un sinnúmero de eventos atléticos donde venían equipos de otros estados aquí a Tucsón para competir, y también cancelamos otro tipo de eventos en espacios públicos, como los parques.
¿Cómo es “ordenar” un toque de queda pero “voluntario”?
Dr. García: Es que la habilidad de forzar un toque de queda deriva del (gobierno del) estado, así que solo cuando el estado nos está ayudando podemos hacerlo no voluntario, porque de esa manera se ponen en acción los recursos de la policía. Lo que estamos pidiendo es que, de manera voluntaria, las personas usen su “cabecita” para tratar de evitar esas situaciones.
En conclusión:
Dr. García: Sí estamos en una situación crítica. Todavía no es de emergencia, pero es crítica. Tenemos algunos recursos hospitalarios en cuidados intensivos, pero no tenemos la capacidad para sobreponer un accidente grande. Así es que es muy importante proteger nuestra salud y la salud de nuestra familia.
La medida es resultado del panorama definido como "aterrador" por la Dra. Theresa Cullen, directora de salud del Condado Pima. “Los casos están muy por encima de nuestro aumento del verano".
