Cuando los Naranjeros de Hermosillo armaron un trabuco en la temporada 2000-2001, año donde adquirieron a Vinicio Castilla y junto con Erubiel Durazo tuvieron a dos elementos mexicanos que brillaban en la Major League Baseball, avanzaron tranquilamente a la postemporada, pero aún así recuerdo cómo festejaron cuando en esa temporada los Tomateros de Culiacán no avanzaron a playoffs.
A los Guindas les había ido muy mal. Cambiaron varias veces de mánager en medio de la temporada. Le buscaron por todos lados y aún cuando llegaron al último día del rol regular un tanto golpeados, la afición de Hermosillo y los mismos peloteros de Naranjeros sabían que Tomateros era un rival peligroso, y si se metía a postemporada iba a crecerse, de ahí la celebración cuando Culiacán quedó eliminado.
Algo similar supongo ocurre con la afición de los Dodgers de Los Ángeles en estos momentos, se ven algo superiores a los San Francisco Giants, su odiado rival, sobre todo en el puesto de cerrador donde los Giants traen un mundo de problemas. Pero mientras no eliminen a San Francisco el mundo del beisbol está consciente de que ese equipo se puede crecer y dominar de nuevo en el mes de octubre.
Se acaba de presentar una serie que sacó chispas dejando a los Dodgers en buena posición. La próxima semana en el cierre de rol regular se habrán de enfrentar de nuevo.
Por lo visto los Dodgers se llevarán otro banderín divisional, han sacado buena ventaja sobre los Giants. Sin embargo, los del Norte de California siguen con vida, buscando un boleto de “wild card”, y es lo más importante.
Aun si los de Los Ángeles llegan al siguiente fin de semana ya con el título divisional en su poder, deberán jugar esa serie con los titulares si tienen la oportunidad de eliminar a San Francisco; es un equipo al que se le debe temer, deben ver como prioridad el sacarlo de la pelea.
El plantel azul ha dominado en el rol regular, pero el naranja ha sido el amo y señor cada que avanza a postemporada. Ganaron la Serie Mundial del 2010, 2012 y 2014, puro año par, sigue el 2016.
En plena recta final
Casi llegando a su fin el rol regular, los Arizona Diamondbacks tendrán sus últimos encuentros relevantes este fin de semana cuando visiten a los Baltimore Orioles en serie interligas, una novena con posibilidades de jugar el duelo de comodines de la Liga Americana.
Los equipos eliminados suelen jugar estos partidos con los titulares, y es la intención del mánager de Arizona, ponerle un panorama complicado a un plantel que está urgido de victorias. El mánager de los Orioles es Buck Showalter, el primer piloto que tuvieron los Diamondbacks; de hecho, lo firmaron en Arizona dos años antes de jugar el primer partido en la historia de la franquicia.
Showalter es uno de los pilotos más estudiosos. Tiene la fama de llegar sumamente preparado a cada partido, con toda la información posible, apenas así se explica uno cómo es que los Orioles han podido mantenerse en zona de calificación por tanto tiempo a pesar de tener una de las rotaciones de pitcheo más débiles.
Eso sí, tienen un bullpen tan bueno que hasta hay ahí un candidato para ganar el trofeo Cy Young de la Liga Americana, Zack Britton. Saliendo de esa serie se pasarán los Diamondbacks a Washington, donde es muy probable que los Nationals lleguen ya con el título divisional asegurado. Después, cerrarán la temporada en casa recibiendo a los San Diego Padres.
