Por Caitlin Schmidt
La Estrella de Tucsón
Cuando piensa en su experiencia en la preparatoria, Cameron Fimbres, reci´n graduado de Pueblo High School, encuentra difícil identificar un recuerdo favorito.
Fimbres, de 17 años, puede reducirlo ya sea a su segundo año completo o jugar al voleibol, pero reducirlo aún más es muy difícil. Hubo demasiados buenos momentos.
“Mi recuerdo favorito de la secundaria tendría que ser el voleibol”, dijo Fimbres. “Es mi escape del estrés y esas cosas o donde podría presumir ante mis amigos, pero el segundo año también fue muy divertido. Pude jugar con mi hermano antes de que se graduara y probablemente fue el mejor año de mi equipo”.
También podría haber sido su mejor año en la cancha. Fimbres, un rematador de volante y colocador, terminó la temporada con 400 remates.
“Eso fue cuando era muy joven y con mucha energía”, dijo Fimbres. “Las emociones estaban en todas partes y no sabía cómo controlarlas todo el tiempo”.
Ese año, Fimbres, jugador del equipo “varsity” de cuatro años y capitán de tres años para los Warriors, ayudó a su equipo a llegar a los playoffs estatales.
“Hombre, eso fue una gran cosa para Pueblo High School”, dijo Fimbres.
La lista de logros de voleibol de Fimbres es larga, casi una página completa, e incluye numerosos premios de escuelas de Arizona, así como ofertas de torneos de la Asociación Atlética Amateur (AAU) y de USA Volleyball.
Fimbres dice que su mayor honor es una oferta de becas para la Universidad McKendree en Lebanon, Illinois.
Está orgulloso de su reclutamiento, y debería estarlo. Fimbres comenzará allí este otoño.
“Es un gran logro para mí y para Pueblo”, dijo.
Fimbres comenzó a jugar voleibol en sexto grado y descubrió que era natural en eso. Jugó en el equipo de octavo grado ese año. El verano antes de comenzar en Pueblo, su hermano mayor lo llevó a un entrenamiento abierto, donde el joven Fimbres impresionó al entrenador de los Warriors.
“El primer año que probé, y mi entrenador dijo que puedo ser un capitán en JV o luchar por un lugar en el equipo universitario”, dijo Fimbres. “Luché por un lugar en el equipo universitario y eventualmente obtuve un punto de partida. Desde entonces, me ha encantado el deporte”.
Cuando Fimbres se unió a su primer equipo del club el verano anterior a su segundo año, los entrenadores no podían creer que solo tenía 14 años.
“Desde entonces, he jugado dos años por encima de mi edad con una competencia más dura”, dijo Fimbres. “Me encanta la competencia y he trabajado muy duro para estar donde estoy hoy”.
Y aunque ese trabajo sin duda ha valido la pena, la pandemia de coronavirus significa que Fimbres se perdió algunas cosas que significaban mucho para él.
“Creo que lo más importante para mí como atleta fue Senior Night. Siempre esperé tener una gran Noche de Seniors desde el primer año”, dijo Fimbres. “Sabía que iba a seguir moliendo y me apasionaría más. Sabía que esto iba a ser una gran cosa para mí”.
A pesar del final sin ceremonias de su tiempo con los Warriors, Fimbres está mirando hacia la universidad.
“Estoy super emocionado. Para mí será un gran cambio de clima, pero en realidad me gusta el frío”, dijo Fimbres. “Aún así, me va a golpear como un choque de trenes porque hace mucho frío afuera”.
Además de jugar voleibol para los Bogeys, Fimbres estudiará medicina deportiva.
“Ese siempre ha sido mi interés, especialmente como atleta”, dijo Fimbres. “Hacer ejercicio es definitivamente algo importante para un atleta, pero otra gran parte de eso es hacer el ejercicio correctamente”.
Y aunque entrenar en cuarentena no fue fácil, Fimbres dijo que lo aprovechó al máximo.
“Mi papá y yo jugamos mucho pingpong. Tenemos una mesa, pero no tenemos mucho espacio, así que cuando golpeamos las bolas rápidas, no es más que una reacción “, dijo Fimbres. “Así que estoy aumentando mi tiempo de reacción sobre la cuarentena”.
Pronto, Fimbres se reunirá con su equipo del club, el Rush con sede en Queen Creek. Dijo que sintió aceptación instantánea con el club.
“Los muchachos no me menospreciaron por ser un jugador nuevo. Fueron muy acogedores”, dijo Fimbres. “Cuando conocí a estos tipos, eran inmediatamente familiares”.
Los Rush ocuparon el puesto 12 en la región antes de que Fimbres se uniera al equipo. Con Fimbres a bordo, el equipo terminó la temporada pasada cuarto en la región y se clasificó para un torneo nacional en Reno.
“Todos venimos de diferentes clubes y nos unimos e hicimos un gran equipo”, dijo.
