Un boxeador adolescente de Tucsón estará debutando este viernes, 15 de octubre en una pelea por el título de la Organización Mundial de Boxeo que se llevará a cabo en San Diego, Estados Unidos.
José "El Fosforito" Ramírez (1-0, 1 KO) se enfrentará a Floyd "Cashflow" Díaz (2-0), originario de Las Vegas, en una pelea de peso gallo para dar inicio a la cartelera previa a la batalla entre el campeón de peso pluma de la OMB Emanuel Navarrete, y el retador Joet Gonzalez en Pechanga Arena. El evento comienza a las 7 p.m. y se transmitirá por ESPN +.
Esta no es la primera vez que estos dos jóvenes boxeadores se encuentran en el cuadrilátero, según comentó Ramírez. Díaz venció al tucsonense durante su primera pelea amateur en 2016. Desde entonces, Ramírez y Díaz se han superado entre sí en enfrentamientos amateur a lo largo de los años.
“Díaz y yo peleamos en el amateur, por eso sé lo que tiene y cuál es su estilo. Definitivamente peleamos con estilos similares, pero en realidad no hay nada de lo que deba preocuparme aparte de su velocidad", dijo Ramírez. “Sé que tiene buena técnica y, en general, tiene talento. No estoy tratando de subestimarlo, pero sé lo que él tiene y sé lo que tengo".
José “El Fosforito” Ramírez entrena duro mientras termina su último año en STAR Academic High School en el Distrito Escolar de Sunnyside.
El joven de 18 años tenía programado su debut en Estados Unidos durante la pelea por el título de Oscar Valdez contra Robson Conceicao en el Anfiteatro AVA del Casino del Sol en septiembre pasado, pero su oponente abandonó el combate el día antes de la pelea. Ramírez disputó su primer encuentro profesional en México a principios de este año, noqueando a Manuel Ibarra Nubes (0-10) en la primera ronda.
“Estaba muy decepcionado porque puse mucho esfuerzo y se suponía que iba a ser en mi ciudad natal, frente a un público local. Quería mostrarle mis habilidades a la gente de mi ciudad”, dijo Ramírez. “(El oponente) trató de poner una excusa diciendo que su entrenador lo abandonó. Pero su entrenador no iba a dejarlo solo el día antes de la pelea. Ahora está suspendido de pelear durante los próximos seis meses aquí o en México".
A Ramírez no le inquieta que su debut profesional no sea en el Pueblo Viejo (Old Pueblo). Él ve su próxima pelea contra Díaz como su primer paso en el camino hacia la grandeza del boxeo.
“Ganar esta pelea podría llevarme al estrellato. Siento que será mejor tener un gran currículum que tener una pelea local”, dijo Ramírez. “Todavía quiero fortalecerme y desarrollar mi currículum. Quiero progresar y luego volver a casa para pelear”.
Equilibrar su último año en la preparatoria académica STAR de Tucsón mientras se entrena para su próxima pelea en Rhinos Boxing en Vista, California, tiene sus desafíos, comentó Ramírez. La escuela alternativa del Distrito Escolar de Sunnyside le está dando al peleador la oportunidad de completar sus trabajos del curso mientras está en el campo de entrenamiento para que pueda graduarse a tiempo.
Este joven deportista ha pasado los últimos meses viviendo en la casa de su entrenador Sergio Zaragoza en el suburbio de San Diego en San Marcos mientras se prepara para su enfrentamiento contra Díaz.
Zaragoza dijo que le gusta mantener el horario de entrenamiento de su peleador temprano en la mañana y al final de la tarde para que Ramírez se concentre en los estudios durante el día. Los avances académicos son fundamentales para su carrera en el boxeo, dijo el entrenador.
“Tenemos un acuerdo de que él obtenga sus calificaciones y haga su trabajo. Luego puede venir a California conmigo”, dijo Zaragoza. “Si no, puede quedarse en Tucsón, donde no hay nada que hacer para el box. Me importa más su vida que el boxeo, y eso que yo amo el box".
El entrenador ha trabajado intermitentemente con Ramírez desde que tenía 8 años y entrenó a su hermano mayor, Jensen, a lo largo de su carrera profesional. Zaragoza dijo que ha visto a Ramírez convertirse en un gran peleador a lo largo de los años, y cree que el joven de 18 años tiene el potencial de convertirse en campeón mundial algún día.
"Da tanto miedo saber que peleará (este viernes), pero no importa cuál sea el resultado... gane o pierda... se podrá ver que este chico tiene mucho espacio para crecer", dijo Zaragoza. “Fácilmente podría ganar de cuatro a seis libras de masa corporal. En este momento está peleando en 118 libras, pero me gustaría que peleara en 122 libras como lo hizo su hermano en el pasado".
