¿Te has preguntado cómo ha impactado la pandemia del Covid-19 la vida de los niños y las niñas, y de qué manera se pueden abordar estas emociones desde el arte?
Durante los últimos dos años, estas preguntas han impulsado la creación del artista sonorense Alejandro Soria Salazar. El resultado de sus reflexiones y de sus exploraciones pictóricas hace parte ahora de “Los buquis de la pandemia”, una serie de 24 obras expuestas en la galería Leonora Carrington del Consulado de México en Tucsón.
Con el cubrebocas como objeto común, las obras elaboradas en técnica mixta representan los rostros y las expresiones de niños y niñas en medio de la pandemia. En ellas se reflejan sentimientos de tristeza, angustia y enojo.
Como explicó el artista durante el lanzamiento de la exposición el pasado 12 de enero, “el concepto es que el patrón (el cubrebocas) es una protección que traen los niños, una especie de tatuaje, nomás que aquí el truco es que ellos no saben que lo traen, pero están siendo protegidos. Lo visualizo de manera que cuando sean adultos, ese tatuaje los va a ayudar a salir adelante”.
Nacido en Hermosillo en 1961, Alejandro Soria estudió diseño gráfico en la Universidad de Monterrey e hizo una maestría en Artes en Georgia, Estados Unidos, en el Savannah Collage of Art and Design. Tras haberse dedicado durante décadas a la producción editorial y gráfica y a la docencia, Soria comenzó a pintar después de los 40 años.
Esta es su séptima exposición individual y la primera en la que presenta esculturas. Las 22 obras pictóricas varían de tamaño –algunas son de 70x70 cms, y otras son más pequeñas, de 30x30 cms. Las dos esculturas, denominadas “El Morrito” y “La Morrita”, están elaboradas con piezas metálicas.
El título de la exposición tiene una directa conexión con las culturas ancestrales del suroeste de los Estados Unidos y del norte de México. La palabra “buquis”, de origen yaqui, significa niño (a).
Las obras, en general, reflejan también las influencias de los artistas que, a lo largo de su trayectoria han inspirado a Soria: Picasso, Warhol y Basquiat. La exposición está abierta al público hasta el 12 de febrero.