Cuando Marisol Vindiola, directora de Iniciativas con México de Visit Tucson, llegó a Tucsón en el 2001, “no sabía ni J de inglés, ni siquiera podía leer la hoja de los horarios del camión”.

Vino a estudiar el idioma por un año y se regresaría a Hermosillo, dice.

Pero la entonces estudiante del Colegio Comunitario Pima y de El Rio Community Center, recién egresada de administración de empresas de la Universidad de Sonora, quería aprovechar su tiempo libre entre clases, así es que se presentó en el Consulado de México en Tucsón y ofreció sus servicios como voluntaria.

“Yo hacía campañas de difusión para el consulado y hubo gente que me enseñó mucho. Por cierto, uno de ellos fue José Merino, que era editor de La Estrella de Tucsón”, dice Marisol desde la histórica Vieja Corte del Condado Pima en Church Avenue, el otrora edificio rosa con la cúpula de más de 30 metros de altura que tantos matrimonios atestiguó en el Viejo Pueblo.

La Vieja Corte está siendo remodelada para convertirse en Centro de Turismo del Sur de Arizona, concentrando a tres dependencias: la oficina de turismo local Visit Tucson, Atracciones y Turismo del Condado Pima y el Museo de Gemas y Minerales de la UA.

El camino de Marisol hasta la responsabilidad que ahora tiene y su trato cercano con autoridades, empresarios y líderes de Arizona y México no fue en línea recta. Pasó por una temporada en casa, un divorcio y una vuelta a empezar desde otro rumbo.

Cuando regresó a la vida laboral, ya siendo mamá, trabajó en una funeraria y en la tienda Cricket en Irvington y Campbell, donde una clienta fascinada con su servicio le propuso postularse para un puesto vacante en Visit Tucson.

Con el tiempo, la clienta, la aguapretense Martha Tadlock, fue jefa y mentora de Marisol en la oficina de turismo de la ciudad.

Marisol Vindiola.

Y desde que ingresó en el 2008, Marisol no solo ha ascendido posiciones en su empleo sino que ha sido invitada a formar parte de diversos proyectos comunitarios con escasa presencia de mujeres latinas, como el Arizona Town Hall, el Patronato de la Misión San Xavier, Ciudades Hermanas Tucsón-México, Tucson Craft y Tucson Young Professionals.

“Me he dado cuenta de lo importante de trabajar para promover la inclusión y formar parte de nuestra comunidad”, dice Marisol, de 40 años. La clave para lograrlo: “Creértela. Y esa es la parte más difícil”.

Provenir de una minoría le ha enseñado a Marisol dos cosas, una buena y una mala: “Trabajas más -al doble, tal vez, porque mucha gente oye tu acento y cree que eres menos inteligente-, pero a la vez te vuelves más creativo”.

Al final de cuentas, dice la recién certificada maestra de yoga, “tu actitud y tu ambición por salir adelante hacen la diferencia”.

El reto por delante para Marisol es trabajar en proyectos que ayuden a la comunidad mexicana de Tucsón a integrarse más a la sociedad. “Muchas veces no se sienten parte”.

“Aquí tenemos joyas tan preciosas como la Misión San Xavier, la denominación de Ciudad Gastronómica, la Procesión de Todas las Almas, Tucson Meet Yourself, la Conferencia Internacional del Mariachi… Y, ¿quiénes van?”, reflexiona. “La mayoría de los asistentes y de los involucrados son norteamericanos”.

Pero la mamá de Andree, de 14 años, y de Ethan, de 12, tiene entre todas sus metas una más grande: “Que mis hijos vean a su mamá y digan ‘quiero alcanzar cosas más grandes que ella’”.

Marisol Vindiola es integrante de diversas organizaciones sociales donde da voz a la comunidad latina y directora de Iniciativas con México de Visit Tucson. Foto en la Vieja Corte del Condado Pima.


Become a #ThisIsTucson member! Your contribution helps our team bring you stories that keep you connected to the community. Become a member today.