Hace tres años, la hija de 11 años de Mayra Alejandra encontró una obra de arte de macramé en Pinterest.
“Entonces me preguntó, ‘Mamá, ¿puedo por favor, por favor, hacer esto? ¿Podemos hacer este proyecto?’, y le dije ‘Por supuesto’”, recuerda Mayra.
Cuando lo terminaron, Mayra publicó una foto en Facebook para mostrársela a sus amigos y familiares, y esa primera imagen desató una serie de seis mensajes de personas que le preguntaban si podía hacer algo similar para ellas.
De pronto, lo que comenzó como una artesanía simple con su hija se convirtió en el negocio Solace de Mayra, en donde fabrica piezas de macramé creadas alrededor de piezas de cholla abandonada, costillas de saguaro y madera flotante. Ella describe su obra como algo “muy de Tucsón”.
En la actualidad, las creaciones de Mayra se venden en la tienda West Elm en La Encantada. Para celebrar el Mes de la Herencia Hispana –que va desde el 15 de septiembre hasta el 15 de octubre–, su arte se exhibe actualmente en una de las gigantes vitrinas de la tienda.
“Es lo más importante que ha experimentado mi empresa hasta ahora”, dice Mayra, una artista que nació en México y creció en Tucsón.
Solace se enfoca en productos que van desde decoración de paredes, caminos de mesa hasta macetas. Durante el último año, estas obras se pueden encontrar también Ashley Homestore en Tucsón y Oro Valley, y adquirir en línea.
“Me gustaría poder decir que la mía es una historia heredada, que (el macramé) fue una creación de mi abuela y de mi madre y que ambas me la transmitieron. Pero debo decir que lo aprendí en YouTube”, dice Mayra sobre lo que ha sido un proceso de aprendizaje constante y de varios años.
“A partir de ahí comencé a crecer y desde entonces Solace no se ha detenido”, comenta.
La línea actual de instalaciones de arte macramé de Solace se llama “Toda la Tierra”. El nombre refleja el uso que hace Mayra de las plantas del desierto.
En algunas tiendas de la ciudad se pueden encontrar obras con la técnica del macramé construidas sobre troncos de madera o varillas de metal. Pero cuando Mayra vio una cholla, se dio cuenta de que allí había algo especial.
“En todo lo que encontramos en la Tierra, yo veo piezas perfectas para hacer macramé”, dice. “Por eso lo llamamos ‘Toda la Tierra’, porque nunca sabemos dónde vamos a encontrar algo”.
Sobre las características de sus obra, Mayra explica que “Cada una tiene una huella distinta de la Tierra; no hay dos iguales”..
La primera pieza de Mayra hecha con cholla se creó luego de ganar $200 en una rifa. Decidió crear algo para ella, lo que se convirtió en su artículo en venta más popular.
“Lo gracioso es que nunca tuve mi propio diseño. Aunque estaba haciendo piezas de macramé (para otras personas), nunca tuve la oportunidad de hacerme una”, dice Mayra.
“En lugar de usar un tronco de madera, envuelvo el hilo alrededor de una costilla de saguaro (o madera flotante o cholla). Esto para mí es mucho más auténtico”, dice. “Y eso es lo que desde el comienzo estaba buscando: la autenticidad de mezclar en una misma creación la Tierra y el arte mismo”.