La alcaldesa Regina Romero dijo el viernes por la noche que está ordenando el cierre temporal de todos los servicios "no esenciales" en Tucsón para frenar la propagación de COVID-19, siguiendo para ello la definición de "no esencial" anunciada unos días antes por el gobernador Doug Ducey.
Sus acciones se produjeron el día en que las autoridades de salud dijeron que el Condado Pima tiene cuatro muertes conocidas por COVID-19, en comparación con dos que había el jueves.
La orden de Romero dice que los negocios no esenciales deben cerrar antes de las 8 a.m.del sábado 28 de marzo y permanecer cerrados al menos hasta el 17 de abril.
Estos incluyen a minoristas y centros de llamadas que no proporcionan negocios esenciales. Los restaurantes y bares fueron cerrados a principios de este mes.
Romero dijo que también recomienda encarecidamente, pero no exige, que lugares como salones de belleza, salones de uñas, spas y peluquerías se cierren durante ese periodo, a pesar de que Ducey ha incluido los "servicios de higiene personal" entre los que él considera esenciales.
La alcaldesa recomienda que cierren "porque involucran interacciones humanas" que entran en conflicto con la orientación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sobre el distanciamiento social.
Romero también emitió un exhorto de que los residentes de Tucsón se queden en casa "excepto cuando sea necesario para abordar las necesidades esenciales", como obtener alimentos y recetas, aire fresco e ir a trabajar si están empleados en una función esencial.
Corresponderá a los dueños de negocios verificar la proclamación de Ducey, o llamar a la oficina del gobernador, para ver si se definen como esenciales o no esenciales, dijo el abogado de la ciudad de Tucsón, Mike Rankin. Presionado para nombrar los tipos de negocios que podrían no ser esenciales, nombró zapaterías, salones de tatuajes y salones de hookah.
Rankin dijo que las empresas que permanezcan abiertas y que no son esenciales enfrentan posibles delitos menores de la ciudad. Sin embargo, Romero dijo que la policía primero trataría de educar a los dueños de negocios.
La lista de Ducey de lo que él considera esencial, y que está fuera del alcance de las restricciones locales, es amplia, y abarca no solo los servicios públicos y de salud tradicionales, sino que también los prestamistas y las casas de empeño, los campos de golf y la venta de armas de fuego y municiones son considerados esec¡nciales por el Gobernador.
Su declaración también dijo que cualquier orden local debe ser "coordinada con el estado antes de su emisión".
La alcaldesa de Tucsón no fue tan lejos como su contraparte en Flagstaff, el alcalde Coral Evans, quien emitió una proclamación el jueves cerrando peluquerías, salones de belleza y "negocios similares".
La orden de Evans preparó el escenario para un posible enfrentamiento con Ducey, ya que la lista del Gobernador considera que los servicios de higiene personal son esenciales.
Después de la acción de Evans, el senador Vince Leach, republicano de Tucsón, amenazó con presentar una queja ante el fiscal general Mark Brnovich acusando a Flagstaff de desobedecer la ley estatal. Si Brnovich se pusiera del lado de Leach, el alcalde tendría que rescindir la orden o enfrentar una posible pérdida de ayuda estatal. Leach dijo que si otras ciudades hacen lo mismo, incluido Tucsón, presentará quejas similares en su contra.
Romero dijo que cree que algunos de los negocios que Ducey definió como esenciales no son realmente "críticos ni esenciales durante esta emergencia pandémica".
Pero la alcaldesa demócrata, en lugar de desafiar al gobernador republicano, solo "aconseja fuertemente" que cierren. Ella dijo que tiene que "respetar la orden ejecutiva del gobernador".
"No quiero convertirlo en una postura política", dijo, dejando en claro que no quiere ningún posible desafío legal que pueda costarle a la ciudad dinero del reparto de ingresos estatales.
"En este momento no es el momento adecuado para entrar en una pelea legal con el gobernador o la Legislatura", dijo Romero.
Tanto el Consejo de la Ciudad de Tucsón como la Junta de Supervisores del Condado Pima han votado para instar a Ducey a emitir una orden de permanecer encerrados en todo el estado.
El gobernador dijo más temprano el viernes que el estado ya está casi cerrado y que mantendría la opción de encierro y "la usaría en un santiamén" si necesita hacerlo.
El número de casos confirmados de coronavirus en Arizona fue de 665 a partir del viernes por la mañana, con 102 casos identificados en el Condado Pima.
El Departamento de Ciencias de la Salud de Arizona ha identificado 13 muertes relacionadas con el coronavirus en todo el estado.
El Departamento de Salud del Condado Pima emitió un comunicado el viernes que indica que las últimas muertes involucraron a un hombre y una mujer, ambos de 80 años.
"Ambos individuos tenían afecciones médicas que pueden haberlos puesto en mayor riesgo de enfermedad grave", dijo el comunicado. "Las personas mayores y aquellas con otras afecciones médicas deben tomar precauciones adicionales para protegerse".
No se proporcionó información adicional sobre el fallecido, incluso si los casos estaban relacionados o cuáles eran sus condiciones médicas.
El primer caso fatal de COVID-19 del condado de Pima fue una mujer de Tucsón de 54 años que murió el lunes en el Tucson Medical Center. La mujer tenía diabetes, lo que la ponía en mayor riesgo de desarrollar síntomas más graves de coronavirus. Murió a las pocas horas de descubrir que su prueba para el virus era positiva.
La segunda muerte, anunciada el jueves, fue un hombre de unos 70 años con "otras condiciones de salud que pueden haberlo puesto en mayor riesgo".
Romero dijo sobre sus órdenes el viernes: “Aunque estas son decisiones dolorosas, tenemos la obligación moral de hacer lo que sea mejor para nuestros residentes y proteger la salud pública. Después de consultar con mis colegas del Ayuntamiento, el administrador de la ciudad, el abogado de la ciudad, los profesionales médicos, las pequeñas empresas y otras partes interesadas, he determinado que estas acciones son necesarias para proteger la salud pública".
La lista que Ducey emitió esta semana de "servicios esenciales" incluye:
• Operaciones de atención médica y salud pública, incluidos hospitales, entidades de salud pública, distribuidores de equipos de protección personal y empresas de biotecnología;
• Operaciones de servicios humanos, incluidas las que brindan servicios para personas mayores, personas con discapacidades del desarrollo, niños en cuidado temporal (foster care), niños adoptados y personas sin hogar;
• Operaciones de infraestructura, incluyendo producción de alimentos, operadores de servicios públicos, proveedores de construcción e internet;
• Funciones del gobierno, incluidos socorristas, personal de gestión de emergencias, operadores del 911, personal de protección infantil, proveedores de asistencia social y más;
• Operaciones comerciales, incluidos los proveedores de comestibles y medicamentos y recreación al aire libre;
• Organizaciones que brindan servicios caritativos y sociales, incluidas organizaciones religiosas y seculares sin fines de lucro y bancos de alimentos;
• Organizaciones de medios, incluidos periódicos, televisión, radio y otros servicios de medios;
• Estaciones de servicio y otros negocios relacionados con el transporte;
• Instituciones financieras, incluidos bancos y cooperativas de crédito;
• Ferreterías y tiendas de suministros;
• Comercios críticos, incluidos plomeros, electricistas, personal de limpieza, saneamiento, HVAC (aires, calefacciones, ventilación) y seguridad;
• Correo, envíos y logística;
• Instituciones educativas, incluidas escuelas públicas y privadas K-12, universidades y entidades de investigación;
• Servicios de lavanderia;
• Restaurantes para consumo fuera del local;
• Distribuidores de suministros que permiten el teletrabajo y el trabajo desde casa y aquellos que suministran negocios esenciales;
• Transporte, incluidas aerolíneas, taxis y viajes compartidos;
• Servicios de atención domiciliaria y atención, incluso para personas mayores y con discapacidades del desarrollo;
• Instalaciones residenciales y refugios, incluidos aquellos para niños, adultos mayores o poblaciones en riesgo;
• Servicios profesionales, incluidos servicios legales, inmobiliarios y contables;
• Centros de cuidado diurno para empleados "esenciales" exentos de la orden;
• Fabricantes, distribución y productores de productos críticos para la cadena de suministro;
• Hoteles y moteles;
• Servicios fúnebres.