Las camas de hospital de Arizona disponibles para un posible aumento de pacientes con COVID-19 se encuentran en su número más bajo desde julio, y los analistas predicen que podría haber nula disponibilidad pronto.
El estado podría superar el pico que se presentó en julio de pacientes con coronavirus en unidades de cuidados intensivos el 18 de diciembre y alcanzar el tope de la capacidad cuatro días después si hay un aumento de casos debido a los viajes de vacaciones, según las cifras del Instituto de Biodiseño de la Universidad Estatal de Arizona (ASU).
Incluso si no hay un aumento en los casos debido a viajantes que traen el virus aquí, los investigadores de ASU calculan que la capacidad de cuidados intensivos se alcanzaría de todas formas, pero a mediados de enero.
Y el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud, utilizando su propio análisis, calcula que la demanda del estado de camas de cuidados intensivos necesarias para todo tipo de pacientes, con COVID y otras enfermedades, excederá la capacidad hospitalaria a fines de diciembre.
Para la primera semana de enero, el número de personas hospitalizadas en general será mayor que las camas disponibles, predice el instituto.
Un asistente del gobernador Doug Ducey dijo que, si bien el gobernador levantó su orden general contra las cirugías electivas a principios de mayo, técnicamente permanece vigente como un requisito para cualquier hospital que se esté acercando a su capacidad.
Pero Ducey ha dicho que no impondrá restricciones adicionales a las reuniones y operaciones comerciales y no impondrá un mandato estatal de cubrebocas, pasos que los investigadores de ASU dicen que inevitablemente serán necesarios si las proyecciones se concretan.
Los investigadores de ASU dicen que sin medidas adicionales de salud pública, es probable que las reuniones festivas causen entre 600 y 1,200 muertes adicionales por COVID-19 en Arizona en febrero más allá de las proyecciones actuales.
En cambio, el enfoque de Ducey se ha centrado en una vacuna. Publicó un mensaje de Twitter el lunes diciendo que espera dosis "en el terreno a mediados o finales de diciembre".
Incluso alcanzar cifras de capacidad hospitalaria no significa que los pacientes serán rechazados, dijo el asistente de prensa de Ducey, Patrick Ptak.
Dijo que el Departamento de Salud del estado monitorea la disponibilidad de camas de la sala general y la UCI las 24 horas del día, y todos los hospitales deben tener una "capacidad de aumento" del 25%, esencialmente un plan para poner en uso camas sin licencia ni personal.
Eso, sin embargo, no aborda la cuestión de si hay suficiente personal capacitado en el nivel adecuado de atención para tratar con esos pacientes.
Mientras tanto, ha habido un aumento constante en la cantidad de personas que dan positivo por el coronavirus. Y, en general, las hospitalizaciones tienden a seguir esa tendencia dos semanas después.
Ya ha habido algunos informes de hospitales que están al nivel o cerca de su capacidad para pacientes con COVID-19 en los últimos días, incluidos los hospitales en Northwest y Oro Valley del Northwest Medical Care en el área de Tucsón.
En Banner Health, el portavoz David Lozano dijo que esta es "obviamente una situación fluida". Pero dijo que, por el momento, todas las instalaciones de Banner tienen capacidad tanto para pacientes COVID como no COVID.
La portavoz del Tucson Medical Center, Angela Pittenger, dijo que los casos de COVID-19 han "aumentado drásticamente desde donde estaban hace apenas unas semanas".
Dijo que el TMC ha estado al máximo o cerca de su capacidad para casos de coronavirus en los últimos días, con solo una cama de UCI con personal disponible el lunes por la mañana. En general, había 73 pacientes COVID positivos en el hospital y 14 más en espera de los resultados de la pruebas.
El Departamento de Salud pide que los habitantes del área de Tucsón permanezcan en casa entre las 10 p.m. y las 5 a.m. hasta el 31 de diciembre, con el fin de evitar fiestas y reuniones y frenar la propagación del COVID-19.
Los hospitales de Carondelet Health Network "continúan teniendo la capacidad de tratar a los pacientes que necesitan atención médica", dijo Angela Martínez, especialista en comunicaciones de la red, que incluye los hospitales St. Mary y St. Joseph de Tucsón.
“Como cualquier hospital, la cantidad de pacientes internos puede fluctuar a diario y podemos hacer ajustes rápidos según sea necesario, de acuerdo con la orientación de los funcionarios de salud pública y los CDC”, dijo.
En otras partes de Arizona, el Centro Médico de Green Valley estaba a solo ocho camas de su capacidad más alta anterior de cuidados críticos, dijo la semana pasada su director administrativo, Ron Haase. "Y un aumento adicional realmente nos pondría en una situación difícil".
Canyon Vista Medical Center en Sierra Vista está tratando a una docena de pacientes con COVID-19, lo que la portavoz Valerie Weller calificó como un "salto significativo" desde hace unas semanas. Pero dijo que el hospital todavía tiene capacidad de UCI y "nunca rechazamos a las personas".
El Mt. Graham Regional Medical Center, con su capacidad limitada y los 13 pacientes actuales de COVID-19, nunca volvió a las cirugías electivas, incluso después de que Ducey levantara la prohibición a partir del 1 de mayo.
Por el momento, Arizona Hospital and Healthcare Association no ve la necesidad de un límite en los procedimientos electivos, los que generan la mayor cantidad de ingresos netos, incluso con solo 175 camas de cuidados intensivos disponibles en todo el estado, de las 1,727.
Lo que está sucediendo ahora es diferente de lo que sucedió a principios de este año, dijo su portavoz, Holly Ward. En ese momento, dijo, la preocupación enra que se estaba quedando sin equipo de protección personal, como cubrebocas y batas.
"Las cosas han evolucionado" y ya no hay escasez de esos artículos, dijo. "Nos hemos adaptado bastante".
Dejando a un lado la capacidad de las camas, Ward también dijo que una infusión de $ 25 millones de dólares federales distribuidos por Ducey ayudará a garantizar que haya suficiente personal para manejar cualquier aumento, ya sea para contratar ayuda adicional si está disponible o para aumentar la compensación para los trabajadores existentes.
Además, los hospitales individuales están acostumbrados a lidiar con problemas de capacidad de manera regular, incluso cuando no hay una pandemia, dijo Ward.
Pero los datos de ASU e IHME sugieren que la tendencia al alza es más que una rutina. Las proyecciones son que, en el mejor de los casos - es decir considerando que no hubiera un aumento en las tasas de infección debido a los viajes - los hospitales alcanzarán la capacidad general de camas al final del año y los límites de la UCI para el 11 de enero.
El informe de ASU sugiere que no tiene sentido negarse a implementar estrategias de mitigación, diciendo que todo lo que se está haciendo es evitar lo inevitable una vez que se alcanzan los límites de capacidad.
“Se necesitarán intervenciones de emergencia de salud pública adicionales para controlar la transmisión y preservar la capacidad de atención médica en Arizona”, dijo el informe.
Eso incluye específicamente un mandato de cubrebpcas en todo el estado, evitar reuniones de más de 10 personas, cerrar bares y reducir aún más las restricciones de capacidad en los restaurantes, junto con una "aplicación efectiva" de esas medidas.
El IHME analiza el aumento a través de diferentes métricas.
Proyecta que las muertes en Arizona alcanzarán un máximo de 112 por día a mediados de enero, casi el triple de lo que ha estado habiendo, si nada cambia. Por el contrario, sus investigadores calculan que un mandato de cubrebocas en todo el estado podría reducir ese pico a menos de 70.
Ducey ha argumentado que tal orden es innecesaria, diciendo que las ordenanzas locales cubren alrededor del 90% de la población del estado. Y Daniel Scarpinato, su jefe de gabinete, dijo que el gobernador les ha dado plena autoridad a los gobiernos locales para hacer cumplir ese mandato dentro de sus propias jurisdicciones.
Pero las alcaldesas demócratas de cuatro ciudades con sus propios mandatos dicen que no es suficiente si la gente puede viajar a sus comunidades desde áreas sin máscara.
El Institute for Health Metrics Evaluation predice que, si no hay un cambio en la política estatal, la demanda de camas en las unidades de cuidados intensivos excederá la capacidad hospitalaria en algún momento del próximo mes.
También quieren pruebas obligatorias de los viajeros entrantes en los tres principales aeropuertos del estado junto con una cuarentena para aquellos que den positivo. En cambio, Ducey ofrece pruebas voluntarias, y Scarpinato dice que el gobernador presume que aquellos que obtengan resultados positivos aceptarán voluntariamente no salir.
"Revisamos todos los modelos que se nos presentan, incluidos los presentados por socios federales y universidades, así como otras fuentes de modelos públicos", dijo Steve Elliott, portavoz del Departamento de Servicios de Salud de Arizona. Pero dijo que el modelaje no es la última palabra.
"Algunas de las predicciones de modelado que hemos visto a lo largo del tiempo no han sido confirmadas por los datos reales", dijo Elliott, y dijo que el enfoque principal es analizar los "datos en tiempo real informados al departamento", que incluyen los resultados de las pruebas diarias, hospitalizaciones y muertes.
Dijo que esas métricas son "un buen indicador de posibles tendencias futuras".
Circula en WhatsApp un video que aparenta ser de Foro TV dando la información falsa de que los sonorenses podrían visitar Arizona entre el 15 y el 31 de diciembre por vía terrestre.