Sus dos hijas mayores, Dalia y Kenia Sarahí, ya tenían 9 y 11 años cuando el anhelado tercer embarazo llegó. La familia de Mónica Vega y su esposo, Wilfrido Gracia Armenta, se llenó de alegría al saber que era un niño.
El esperado bebé llegó al mundo el 14 de febrero de 2005 en Brigham City, Utah. “Estaba nevando”, recuerda Mónica.
El niño nació, pero Mónica no lo escuchaba llorar. “Y lo que estaba pasando es que mi hijo se estaba asfixiando, se le estaba acabando el oxígeno”, narra Mónica. “Yo estaba anestesiada, pero no totalmente dormida”.
Dice que fueron segundos de angustia total y de pensamientos agolpados.
“Decía yo, ‘Dios mío, por favor, ayúdame, no puede ser que a mi hijo le haya pasado algo’”.
El niño recibió oxígeno y otros cuidados en el Hospital Comunitario de Brigham City y al poco tiempo estaba totalmente bajo control.
Mónica recuerda entre risas que había elegido para su hijo el nombre de Mathew, pero ante las fuertes emociones al momento del parto, y sin pensarlo, cuando le preguntaron por el nombre para llenar los papeles, dijo: “Wilfrido Gracia”, como su esposo.
Wilfrido Jr., estudiante de 9no grado de Cholla High School en Tucsón, cumple 15 años este 14 de febrero. La familia Gracia Vega tiene mucho qué celebrar.