Una agencia de empleo de Tucsón con décadas de existencia ha ampliado sus servicios con un par de programas, uno para ayudar a las personas que regresan de prisión y el otro para mujeres que buscan trabajo en el área de salud mental.

DKA — Dorothy Kret and Associates, nació en 1984 con el objetivo de brindar asistencia laboral a las poblaciones vulnerables, a través de servicios que incluyen evaluaciones, capacitación, asesorías, desarrollo y colocación.

Cuando la tucsonense Dorothy “Dot” Kret asistía a la universidad a principios de la década de 1980, era la mejor amiga de un hombre que usaba una silla de ruedas. Su experiencia como amiga y defensora de este hombre, la inspiró a ayudar a empoderar a las personas con discapacidades, comentó Darius Wentz, coordinador de divulgación del Programa de Justicia de DKA.

“Sentía que él era invisible para la comunidad. Cada vez que iban a algún lugar, era como si lo ignoraran”, dijo Wentz. “La gente no lo miraba a los ojos y solo hablaban con ella. Eso le molestaba mucho”.

Kret decidió crear una organización y fundó DKA. Su objetivo era empoderar a las personas con discapacidad para que tuvieran éxito en la vida, especialmente en las áreas laborales. A lo largo de los años, DKA amplió sus servicios para ayudar a las personas con barreras de salud mental o conductual para tener un empleo.

Dorothy “Dot” Kret, directora ejecutiva y fundadora de DKA, Dorothy Kret and Associates.

En 2021, la agencia solicitó fondos de ayuda de COVID-19 de la autoridad regional de salud conductual contratada por el estado, Arizona Complete Health, con la esperanza de expandir las operaciones a otras dos poblaciones: personas que salen de prisión y mujeres con experiencia vivida en la recuperación del uso de sustancias, mujeres que están buscando una carrera en salud conductual.

Su financiamiento fue aprobado en noviembre y las nuevas iniciativas, Programa de Justicia (Justice Program) y Trabajando con Mujeres (Working With Women), se lanzaron el 1 de marzo.

Manejo intensivo de casos

Los coordinadores de extensión y el personal de apoyo de los dos nuevos programas comenzaron pronto a trabajar para encontrar clientes e informar a los miembros de la comunidad sobre las iniciativas y lo que ofrecen en términos de amplio apoyo.

“Nos pusimos manos a la obra”, dijo Wentz, quien trabaja con personas antes y después de la liberación en el Programa de Justicia. “Cualquiera que sea la barrera u obstáculo al que se enfrenta nuestro socio-cliente, trabajamos uno a uno con ellos para superarlo”.

Wentz describió el proceso como una “administración intensiva de casos” que aborda, más que solo un empleo. Para los socios-clientes de Wentz que salen de la cárcel, la vivienda es un gran problema y él trabaja arduamente para brindar muchas opciones.

“Podría ser un problema de abuso de sustancias o podría ser una variedad de cosas. Sea cual sea la necesidad, trabajamos con esa persona para superarla”, dijo Wentz.

Wentz tuvo su propio roce con el sistema de justicia hace años, apenas si puedo evitar una pena de prisión por un cargo de drogas en Missouri.

“Entiendo cómo se sienten estas familias”, dijo Wentz, quien ha pasado años trabajando con grupos que trabajan con prisiones. “Me encanta mi trabajo y no veo la hora de llegar aquí todas las mañanas”, dijo.

Una de las primeras ideas de Wentz para el Programa de Justicia de DKA fue crear un armario de ropa para hombres repleto de atuendos profesionales para entrevistas de trabajo. “Hay muchos de esos en Tucsón para mujeres, pero ninguno para hombres”, dijo Wentz.

Ahora, Dress for Success: Men’s Wardrobe (Vístete para el éxito: Vestuario masculino) está disponible para los socios-clientes del Programa de Justicia y para otros hombres de la comunidad, con ropa gratis para quienes la necesiten.

Antes de comenzar con DKA en la primavera, Wentz trabajó como pastor, capellán de la policía y pasó unos 25 años en el periodismo televisivo. Ahora, como parte de su posición en DKA, Wentz viaja a prisiones de todo el estado, habla con reclusos y funcionarios penitenciarios sobre el Programa de Justicia y trabaja con personas mientras aún están encarceladas, siempre que sea posible.

“De esa manera, para cuando estén en libertad condicional, ya nos estamos mudando”, dijo Wentz. “Nos asociamos con personas para mejorar sus vidas. Eso se remonta a lo que DKA está tratando de hacer”.

Certificación y apoyo

La subvención que recibió DKA para su programa Working With Women se centró en el abuso de sustancias, lo que llevó a la creación del programa para mujeres interesadas en el campo de la salud conductual. El objetivo principal es lograr que las clientas se certifiquen y contraten como especialistas en recuperación o apoyo entre pares, dijo la coordinadora de extensión Raeleen Francisco.

El programa está dirigido a mujeres que tienen un historial personal de uso de sustancias y de recuperación, pero el programa también está abierto a mujeres con experiencia vivida desde otro punto de vista.

“Tal vez tienes una mamá, un papá, un hermano, una hermana o alguien cercano a ti con quien pasaste por esa dificultad. Solo tienes que tener esa experiencia vivida”, dijo Francisco. “La población con la que trabajarán son personas que tienen su propia adicción y quieren la misma ayuda, por lo que es importante reconocer cuándo puedes ser ese compañero y comprender realmente lo que esa persona necesita”.

El programa brinda apoyo a los clientas ayudándolas a encontrar y tener éxito en programas locales de capacitación de especialistas en apoyo a la recuperación y, si es necesario, educación básica o continua.

Los servicios asociados adicionales, ya sean médicos o conductuales, son gratuitos para los clientes, y la DKA factura al Sistema de Contención de Costos de Atención Médica de Arizona, el Sistema de Medicaid del estado.

Hasta ahora, el crecimiento de Working With Women es un poco más lento que el del Programa de Justicia. Francisco dijo que actualmente tiene nueve clientes, pero otros seis han completado el programa. Cuatro ya se han asegurado puestos de trabajo en el apoyo de pares.

También ha habido cierta superposición con el Programa de Justicia, con muchas personas que salen de prisión interesadas en convertirse en compañeros de recuperación, dijo Francisco.

“Podemos ayudar en la educación si quieren obtener un certificado o una licenciatura o un grado”, dijo Francisco. “Podemos acompañarlos mientras dan los pasos en esa dirección y apoyarlos”.

Francisco también conecta a las clientas con los recursos necesarios, ya sea vivienda, cuidado de niños u otros tipos de asistencia. La ropa profesional es el artículo más solicitado, y Francisco remite a las clientas a Eagles Wings of Grace o My Sister’s Closet, según su ubicación.

Francisco ha visto el sistema de justicia por dentro y por fuera, ya que anteriormente trabajó como oficial de correcciones en una prisión y luego como administradora de casos con menores en detención, libertad condicional y desviación en una reserva.

“Es genial que DKA haya iniciado este programa para aquellos que necesitan ese apoyo extra, coraje o fuerza para seguir adelante”, dijo.

To learn more about DKA and its employment services, visit dkajobs.com

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Contacta a la reportera del Arizona Daily Star Caitlin Schmidt al 520-573-4191, al email cschmidt@tucson.com o en Twitter: @caitlincschmidt. Este reportaje hace parte de la sección de Periodismo de Soluciones del Arizona Daily Star.

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