Da igual si te dedicas a la pintura, la escultura, la danza o la literatura. Puede ser que seas DJ, mariachi, coreógrafo, poeta o artista digital. Si lo tuyo es el arte en cualquier formato y vives en Tucsón o en el Sur de Arizona, The Arts Foundation puede ofrecerte el apoyo que buscas para seguir adelante con tus proyectos artísticos.
Esta fundación –que ha cambiado de nombre a lo largo de su historia–, fue creada en 1971, cuando un grupo de tucsonenses se unió para consolidar el Consejo de las Artes de Tucsón (Tucson Pima Arts Council -TPAC-) , una comisión que se dedicara a promover el arte en la región y a servir como catalizador y fuente de información para el desarrollo cultural.
Cuarenta y cinco años después, en 2016, la Junta Directiva votó para cambiar el nombre por The Arts Foundation for Tucson and Southern Arizona, reflejando así el enfoque de la organización de servir e incluir a toda la comunidad artística de la región.
La artista sonorense Adriana Gallego, actual directora ejecutiva, comenta que “lo que hacemos en The Arts Foundation es dar apoyo financiero por medio de becas a artistas independientes, colectivos, instituciones culturales y centros de arte y cultura, además de ofrecer consultorías y programas de desarrollo profesional para quienes avanzan por estos caminos”. La fundación dirige también el programa de arte público para la ciudad y para el Condado Pima.
A través de becas y subvenciones, esta organización impulsa el trabajo de artistas en Tucsón y en las comunidades de Nogales, Douglas, Yuma, Sierra Vista, Bisbee.
El impacto de la fundación llega también a todos los condados y naciones soberanas nativas al sur del río Gila, incluidas 372 millas a lo largo de la frontera internacional entre Estados Unidos y México en el sur y a lo largo del tramo de 590 millas del río Gila, que fluye hacia el oeste desde la frontera de Nuevo México hasta el Río Colorado.
Además de la junta directiva, el equipo de trabajo de la fundación está compuesto por artistas profesionales que vienen de regiones fronterizas como Nogales y Agua Prieta. La directora ejecutiva en particular, Adriana Gallego, tiene más de 20 años de experiencia en administración de las artes. Ella creció en ambos lados de la frontera en Nogales, entre Sonora y Arizona. Exalumna de la Universidad de Arizona y miembro fundadora de Raíces Taller 222 Gallery and Workshop, en Tucsón se convirtió en artista profesional y lanzó su carrera. Después de vivir durante décadas en California, Phoenix y Texas, regresó a Tucsón con su esposo, en noviembre de 2020.
“Realmente estamos tratando de ser diversos, inclusivos y equitativos entre generaciones, géneros, culturas, fronteras políticas, geografías”, dice Gallego. “En el fondo siento que las artes y la cultura son el antídoto para tanto que sucede”.
Arte y Covid-19
En medio de la pandemia por el Covid-19, tanto esta fundación como toda la comunidad de artistas del Sur de Arizona experimentaron el reto de sostener sus proyectos y sedes. Según informa Gallego, sólo la ciudad de Tucsón perdió alrededor de 26 millones de dólares en los ramos de arte y cultura.
Con el compromiso de brindar apoyo en momentos tan complejos, el equipo de profesionales de la fundación se dedicó a activar múltiples alianzas y relaciones locales, estatales y nacionales para ayudar a los artistas a mitigar la pérdida de ingresos y medios de subsistencia.
Por una parte, en alianza con la Comisión de las Artes de Arizona, se establecieron dos fondos de subvención de $25,000 para ayudar a los artistas visuales y a los músicos afectados por la pandemia. La fundación también recibió una subvención del National Endowment for the Arts para apoyar con hasta $250,000 a las organizaciones artísticas de Tucsón que debieron enfrentar dificultades con el cierre debido a la pandemia.
Con la ayuda de fondos privados y fondos de la ciudad, el condado, el estado y el nivel federal, Gallego dice que The Arts Foundation pudo distribuir un total de más de $2.2 millones a artistas y organizaciones artísticas durante el último año, un período que, según ella, fue uno de “urgencia y necesidad durante la pandemia”.
Comenta Gallego que, “así, pudimos dar becas por pérdida de trabajo y ofrecer reembolsos a personas que dedicaron mucho tiempo, por ejemplo, a sus ensayos, pero no pudieron presentarse y no recibieron pagos; entonces les retornamos lo que perdieron”.
Ubicados en una nueva sede en las instalaciones del YWCA, Adriana comenta que “estar en el barrio con nuestra gente nos permite demostrar que nuestra comunidad es parte central de nuestra visión y que estamos aquí para lo que se ofrezca: si no sabemos cómo hacer algo, o lo figuramos o conocemos a alguien que nos puede ayudar”.
Cómo aplicar a becas y subvenciones
En la actualidad, la fundación está actualizando su página web en donde se pueden encontrar los portafolios de becas tanto en inglés como en español y en los idiomas O’odham y yaqui. Constantemente, el equipo difunde las oportunidades en medios de comunicación, folletos y redes sociales.
“Sabemos que hay muchas partes de nuestra región en donde, por ejemplo, la comunidad no tiene acceso a Internet”, comenta Gallego. “Por eso buscamos alternativas y trabajamos para asegurarnos que los artistas puedan acceder a las oportunidades”. Si alguien tiene sólo un teléfono y quiere aplicar a una beca, pueden comunicarse con la fundación y allí les ayudan a postularse.
“No hay nada, incluso en la composición de nuestros cuerpos, que sea igual. Es por esas diferencias que nuestros cuerpos son un milagro”, dice Gallego. “Personalmente, me lo tomo muy en serio en términos de cómo nos acercamos a nuestras comunidades para garantizar que todos tengan acceso a los mismos recursos y que podamos eliminar cualquier barrera para acceder a ellos. Comprendemos que hay cosas que están fuera del control de las personas y estamos para ayudar”.
Esta primavera la fundación dará comienzo a un programa para artistas individuales que consistirá en becas de $4,000 a $5,000 para estudiantes de preparatoria que se están graduando y que quieran ir a Pima Community College o Tohono O’odham Nation Community Collage. Así mismo, la fundación ha recibido recientemente otros $500 mil del National Endowment for the Arts.
“Al final del día, se trata realmente de asegurarnos de que nos preocupamos por las personas creativas que, en el fondo, están dando vida a nuestros sueños y nuestras historias”, dice Gallego. “Invertimos en pensadores creativos. Y si invertimos en pensadores creativos, nunca nos faltarán soluciones”.