Fue hace 70 años cuando en plena recta final de temporada de la Major League Baseball, en mes de septiembre, los Boston Braves tuvieron un doble juego ante los Brooklyn Dodgers. Los dos partidos los ganaron con su pareja espectacular de lanzadores, Warren Spahn y Johnny Sain.
Enseguida vinieron cuatro días donde la lluvia impidió que jugaran. Cuando regresaron a la acción tuvieron otra doble cartelera ante los Philadelphia Phillies y de nuevo con la pareja de Spahn y Sain barrieron al rival.
Fue entonces cuando hicieron un poema que trataba de la fórmula con la que los Braves podían ganar la Serie Mundial, porque jugaron en ese 1948 el Clásico de Otoño ante los Cleveland Indians, “Spahn and Sain; then pray for rain”.
No había de otra. Tenían a dos excelentes lanzadores pero necesitaban al menos uno más, o bien que la lluvia impidiera jugar y para cuando lo permitiera estuvieran de nuevo con descanso los “caballos” del montículo.
Los Braves perdieron el Clásico de Otoño en seis partidos. No sólo se ausentó la lluvia, tampoco hubo días de descanso, se jugó en forma corrida del 6 al 11 de octubre.
Si aquella Serie Mundial hubiera sido con el clima de las primeras semanas de abril de 2018, los Braves capaz de que ganan por limpia. En cifras escandalosas se han estado suspendiendo juegos debido al mal clima, mayormente en el noreste de los Estados Unidos.
Bueno, hasta en Canadá y en el estadio techado de los Toronto Blue Jays se tuvo que suspender un partido por cuestiones de seguridad. Fue debido a unos trozos grandes de hielo que estuvieron cayendo de una torre que está a un lado del estadio de los Blue Jays, ello tras una fuerte tormenta de nieve registrada unos días antes en Toronto.
El clima le ha estado jugando rudo a la MLB. Durante el pasado fin de semana, en un día se suspendieron seis juegos. Parece ser el arranque de temporada con más suspensiones en la historia. Por tal motivo, se le pudieran presentar fuertes retos a varios equipos a lo largo de la campaña; hay clubes que están entrando en períodos de muy poca acción y tendrán que reponer luego esos encuentros.
Propuestas
Lo que se ha estado presentando en la MLB de tantas suspensiones de partidos ciertamente se da a la larga. De hecho, cuando planearon la construcción del estadio de los Minnesota Twins, entre otras cosas se planeó sin techo porque los estudios revelaron que con el clima que se había estado presentando en la Tierra de los 10 mil lagos se hubieran suspendido pocos partidos por lluvia; en cambio, recientemente dejaron de jugar por tres días seguidos por una fuerte nevada.
Es cuestión de que ocurran acontecimientos como el de 2018 para alarmarse y presentar todo tipo de propuestas, y así se ha estado dando mediante comentarios de gente involucrada con la MLB. Entre otras, está el reducir el número de juegos por equipo y no empezar la temporada tan temprano, cuando todavía en buena parte del país las temperaturas son muy bajas y por ende el pelotero está más expuesto a una lesión; y sabemos las fuertes inversiones que son los big-leaguers.
Igual de repente se escucha el consejo de iniciar el calendario con partidos programados solo en estadios techados y lugares donde en abril hay mejor clima, alejarse del noreste, sin embargo sería ilógico tener jugando a equipos por tres o cuatro semanas seguidas de visitantes.
Solo queda esperar que 2018 sea mucho más lluvioso que 2019 y 2020, si no es así necesitarán ir pensando en un cambio.
