Recuerdo que antes les hacía el feo a los documentales; injustamente, quiero aclarar, como cuando uno rechaza una comida antes de probarla. Fue de hace unos años para acá que les tomé afecto (bastante afecto), sobre todo cuando descubrí los sabores y emociones particulares que despierta este género cinematográfico.
Fueron realizaciones como The Thin Blue Line (1998), Searching for Sugar Man (2012), The Act of Killing (2012), Man on Wire (2012), Capturing the Friedmans (2003), Grizzly Man (2005) y West of Memphis (2012) las que me cerraron la boca y me mostraron lo emocionante que puede ser el atestiguar una historia real, presentada con todos los recursos que tiene el cine: edición, música, etc.
Con sólo ver el tráiler de The All-Americans (Billy McMillin, 2017), documental que, por cierto, fue dirigido por el guionista de West of Memphis, uno se da cuenta de que la historia que tiene los ingredientes necesarios para despertar las emociones de cualquier espectador, sobre todo las del hispano.
La cinta se exhibe en una función única el martes 10 de diciembre en el Harkins Theatres Tucson Spectrum 18 a las 7:00 p.m.
Y es que temas como el lugar que el hispano ocupa en el país, así como las oportunidades por las que debe luchar, son el motor de esta producción que tiene como protagonista al deporte por excelencia de Estados Unidos: el futbol americano.
El tráiler abre con una voz en inglés que dice: “L.A. se está convirtiendo en México y tenemos que decidir si esto es algo bueno o algo malo”; y a esta frase se le suman otras que incluyen palabras como “…estos ilegales”, “…y vienen a tu país y…”, entre otras, así que ya se imaginará los dilemas que se desarrollarán a continuación.
El filme se enfoca en el enfrentamiento entre los equipos de futbol americano de las escuelas Garfield y Roosevelt, que con los años se ha convertido en el famoso East L. A. Classic, una de las rivalidades más feroces que existe en el país.
Sus protagonistas, como es de suponerse, tienen muchas cosas más que probar que su habilidad en el juego. Del lado de los jugadores, en el documental se dejan escuchar frases también muy significativas, las cuales describen perfectamente que no es sólo un partido de futbol lo que está en juego.
“¡Yo quiero respeto y quiero que todos ustedes quieran respeto!”, grita uno de los líderes a su equipo en el vestidor. “Yo tengo sueños, así como todos los demás los tienen”, dice otro de ellos a la cámara, reflexionando sobre la importancia que tiene el juego en el contexto de su vida personal y su futuro.
La cinta sigue de cerca la vida personal de cuatro muchachos (integrantes de ambos equipos) en su camino personal y cómo, por muchas razones, este evento es el más significativo de su vida.
Para los productores (entre ellos la actriz y cantante Becky G), resulta increíble que un partido tan relevante sea desconocido fuera del Este de Los Ángeles. Sin duda, este excitante documental servirá para colocar este enfrentamiento deportivo -que reúne a más de 25 mil apasionados seguidores- en el sitio que merece.