El Día de Muertos está aquí. Se celebra de formas distintas en uno y otro lado de la frontera, incluso entre cada uno de los estados de México. Y mientras el festejo cobra popularidad, una de sus más arraigadas tradiciones es la de las calaveras literarias.
Se trata de poemas cuyos versos riman. Generalmente están dedicadas a políticos y artistas, vivos o muertos, aunque también se escriben para familiares y amigos e incluso para lugares o situaciones.
Estas composiciones literarias forman parte de la cultura popular de México, lo que da paso al ingenio, la broma y un lenguaje informal, aunque respetuoso.
Aunque esta vez no organizamos concurso en La Estrella de Tucsón, sí fuimos parte del taller “La Calavera es un Poema”, organizado por UNAM-Tucson, el Consulado de México en Tucsón, Visit Tucson y La Estrella, impartido por la Dra. Alba Nora Martínez.
Hoy te compartimos estas creativas calaveras enviadas por miembros de nuestra comunidad. Esperamos que las difrutes y que juntos mantengamos viva esta tradición.
Al Consulado de Tucsón
La Flaca, previsora, puso en orden su documentación
Muy astuta sacó cita en el Consulado de Tucsón
Pasaporte, matrícula, y credencial para votar
Anda impaciente con mil almas por segar
Llegó la Muerte muy puntual a la ventanilla tres
Sorpresa se llevó de la expedición con rapidez
Ni la falta de huellas en los dedos ni de ojos para ver
Retrasaron el servicio, concluido sin revés
Muy enojada dijo la Flaca
“En esta oficina le dan más tiempo a la vida,
cosa de verse”, murmuró enojada y decidida
Y se fue a hacer de las suyas al sector Tucson
Fúrica quedó por la consular labor de protección:
Rescates, CIAM, y buena orientación
de sus planes arruinaron por completo la sazón
Ven, Flaca, que en el Consulado te esperamos
Con el mismo cariño de a quienes extrañamos
Y cuando llegue nuestro día, como bien sabemos
En la ofrenda consular tequila, sal, y pan te postraremos
Por Lee Wong Medina, Cónsul Adscrito del Consulado de México en Tucson
A los alfombristas en Tucsón
En la ciudad de Tucson muy alegres
Las calacas celebraban
Pues el Día de muertos llegaba
Prometiendo grandes tandas.
El consulado era jolgorio
Pues Rafael les regalaba
Mandarinas y chocolates
Para llenarse las panzas.
Los muertitos se animaban
Porque el frío por fin llegaba
Pues el calor del desierto
Casi siempre los asfixiaba.
Esperaban muy ansiosas
Las calacas en sus tumbas
La entrada del tapete
Para recibirlas con enjundia.
Los tapetes de Tlaxcala
De aserrín los coloreaban
Las calacas muy contentas
En sus figuras bailaban.
Con la música se animan
A salirse del panteón
Pues viene ya la fiesta
Que esperaban ya un montón.
Lo mejor que disfrutaron
Fue la comida que llevaron
Los taquitos y el molito
Que los vivos envidiaron.
Ya con esta me despido
Desde Tucson con amor
Ya me voy por mi taquito
O se acaban los de arroz.
Por Diana Peralta, Hispanic Serving Institution Initiatives – Universidad de Arizona.
Al español
A algunos les daba vergüenza
Otros lo hablaban mal
A muchos les daba pereza
Y nadie lo quería jalar.
Era el español de Mexico
De España, Perú y Panamá
Quedaba a un lado en Norteamérica
Lo daban para enterrar.
Pero los músicos ganaban Grammys
Cantando en esa lengua su rap su reggaetón, sus corridos
Lo habían dado por muerto
Pero estaba de festival.
Por Silvia Grijalba, Directora Ejecutiva, Instituto Cervantes de Albuquerque
A escribir la calavera
Otro año ya nos Llegó
Es día del gran fiestón
¡A divertirse de veras!
A escribir sus Calaveras
Antes de irnos al panteón.
La Calaca que es atenta:
Leyó noticia de un taller
Que UNAM/Tucson organiza
A inscribirse se dio prisa
Aullando de la emoción.
Después de ya haberse inscrito
La Pelona musitó
A Arnoldo, a Miriam y a Elena
Al panteón los llevo yo.
Ah… y por Kathy preguntó.
Alba Nora muy valiente
a la huesos se enfrentó.
Después de mucho exigirle
La Catrina entra en razón.
Los regresa enteritos
No se los lleva al panteón.
Quién quiera la diversión
Y… escribir sus calaveras
¡Que se muera de una vez!
Y sin risas lastimeras
Escriba su Calavera
En el Taller UNAM/TUCSON.
Por Alba Nora Martínez, UNAM – Tucson.
Calaveras creadas en el talle "La Calavera es un Poema", impartido por la maestra Alba Nora Martínez.
Al Taller de la Maestra Alba Nora
La calaca entusiasmada,
hasta Tucson se voló,
voy al Taller de Alba Nora
para aprender lo mejor.
Literata renombrada,
enseña con devoción,
los tipos de calaveras,
rima, copla y canción.
Al Consulado llegó
Alba Nora cantando,
con mi jarana me voy
de la Catrina pasando.
Que Taller más emotivo,
conmueve hasta la calaca
y Alba Nora permitió
que ella participara.
La Catrina entusiasmada
versos con rima creó
dedicados para el Cónsul,
a UNAM Tucson
le compuso una canción.
La huesuda agradecida
por tan grata ocasión
deja libre a Alba Nora
y se va alegre al panteón.
Por María Gabriela Brito Arroyo
Blanca razón
A rumor de cementerio
ella anda entre los mortales,
amanece el gran misterio:
es tiempo de funerales.
De miedo bailan los huesos
si ya sientes que te mueres,
muere ella por darte besos,
es romántica, ¡Qué quieres!
5
Hay que tenerlo presente,
no vas a morir de calma;
la Flaca, quizás, te tiente
a ver si aflojas el alma.
Si bien, es na injusticia
que nos pare el corazón,
no creas que es con malicia,
tiene una blanca razón.
Para nuestra mala suerte,
es un drama de novela
que esté la dichosa Muerte
buscando a su alma gemela.
Ya despidiendo nos vamos,
¡Qué desgracia tan mortal!
Nuestro tiempo terminamos
de noche, en sueño otoñal.
Por Alejandro Mauricio Dueñas García
Calavera a UNAM- Tucson
Está la muerte sentada
En los pasillos de UNAM-Tucson
Tiene cara de asustada
Pues reprobó esta lección.
La tarea consistía en un relato de ficción
Escrito en lengua inglesa con mucha erudición
Pero esta muerte distraída no puso nada de atención
Y en lugar de un “relato”, un “relajo” entendió.
Confundida como estaba de Spanglish se valió
Entre traducciones alteradas puro chisme inventó
Estudiantes, maestros, economistas y abogados
Sean lo que sean todos fueron difamados.
La administración muy indignada
Ha pedido que esta muerte
Por andar de revoltosa
Regrese al sur del continente.
Pero quién puede retar a una Catrina tan astuta
Si tan solo de un chasquido ella nos manda a las tumbas
La UNAM-Tucson es el lugar que más le gusta
Así que no te preocupes, Parquita, y quédate junto a los pumas.
Por Clara González