El último fin de semana del mes de julio trae la ceremonia de entronización al Salón de la Fama de la Major League Baseball. Este año tiene calidad, como siempre, y ahora también cantidad. Serán seis los que ingresen, cuatro vía votación de periodistas, incluso de diferentes posiciones.
Chipper Jones, que fue tercera base; Jim Thome, que anduvo de primera y tercera base y también de bateador designado; igual entrará Vladimir Guerrero, que fuera jardinero derecho; Alan Trammell jugó las paradas cortas; Jack Morris fue pitcher abridor, y Trevor Hoffman, ex Wildcat de la Universidad de Arizona, lanzador relevista.
Con el ingreso del dominicano Guerrero continuará la racha de los latinos. Han estado presentes en los últimos años. Le tocó en 2017 al boricua Iván Rodríguez, en 2015 fue el dominicano Pedro Martínez quien reunió los votos suficientes, en 2011 fue el turno del puertorriqueño Roberto Alomar.
El año entrante deberá entrar el panameño Mariano Rivera, será su primer año de elegibilidad. Por su parte, el también boricua Edgar Martínez tendrá la última oportunidad vía votación de periodistas, y un poco después vendrá el turno del quisqueyano David Ortiz.
Una buena cantidad de latinos tienen altas posibilidades de ingresar, me parece es algo que no sorprende. En la década de los ochentas empezamos a ver mayor presencia de ellos en la gran carpa y sobre todo siendo protagonistas.
Empezamos a verlos dominar, incluso casi todos los equipos de MLB pusieron academias en República Dominicana y Venezuela. Valió la pena la inversión, porque lograron sacar excelentes peloteros.
Los dominicanos Albert Pujols y Adrián Beltré siguen activos y, por lo visto, ya tienen un lugar seguro en el nicho de los inmortales. El venezolano Miguel Cabrera igual tiene excelentes credenciales.
Pujols ha dejado de batear para un alto porcentaje pero sigue pegando jonrones y remolcando carreras. No me extrañaría que se conviertiera en el cuarto pelotero en todos los tiempos en MLB en arribar a los 700 jonrones. Beltré, por su parte, deberá superar en hits este año a gente como Tony Gwynn y Robin Young, muy probablemente cuando se retire estará entre los mejores diez en hits en todos los tiempos. Por su parte, Cabrera tiene promedio de por vida en estos momentos de .316. Ha ganado cuatro títulos de bateo.
Definitivamente, estaremos escuchando discursos en español un tanto seguido en Cooperstown. Por lo pronto, le toca el turno a Vladimir Guerrero en 2018.
Otro buen ingrediente de finales de julio
Las firmas de agentes libres estuvieron tranquilas durante el pasado receso de campaña, pero los cambios de peloteros en medio de la temporada actual está resultando diferente.
Peces gordos como Manny Machado y Brad Hand ya cambiaron de equipo. Los Atléticos de Oakland, que suelen manejarse con bajo presupuesto, también han estado activos adquiriendo estelares. Promete emociones la recta final del mes de julio, por las fuertes transacciones que es muy probable se concreten.
En esa conversación se encuentran los Arizona Diamondbacks, quienes el año pasado adquirieron por estas fechas a su máxima adquisición en medio de temporada en la historia: J.D. Martinez, que fue clave para meterse a playoffs.
Atención, entonces, porque los últimos equipos campeones de Serie Mundial han logrado cambiar por una o más piezas claves en mes de julio. Los Houston Astros el año pasado se llevaron a Justin Verlander, los Chicago Cubs un año antes cambiaron por Aroldis Chapman.
