Al parecer, la mancuerna Burton/Depp ya dio lo que tenía que dar y, después de tanta colaboración entre ambos, como que se desgastó un poco su trabajo creativo antes de llegar a los 10 filmes juntos (llevan 8).
Como bien sabemos, del ya célebre dúo, era el cineasta originario de Burbank, California, quien aportaba la cuota de estética tenebrosa/gótica del producto; por su parte, el dizque multifacético actor contribuía con la recargada excentricidad de sus actuaciones.
Para su cinta más reciente, Dumbo, (2019), Burton ha dejado de lado a Depp para recurrir a otro de sus actores icónicos: Michael Keaton, con quien ya realizó las buenísimas Beetlejuice, Batman y Batman Returns. Por cierto, también repite con Danny DeVito, con quien ya trabajó en Mars Attacks!, Big Fish y Batman Returns.
Como todo mundo sabe, Dumbo es una de las cintas icónicas de Disney (fue apenas su cuarta película), la cual salió al público en 1941 como una forma de resarcir el fracaso económico que significó Fantasía (1940) para el famoso estudio.
Era algo de esperarse que la de Burton fuera una versión algo distante con respecto al clásico de Disney y al material original en el que se basó: un libro infantil creado por Helen Amberson y Harold Pearl; eso sí, hay quien afirma que otra fuente de inspiración fue un gigantesco elefante cuyos ataques de ira sólo podían apaciguarse con whiskey y que era propiedad del famoso P. T. Barnum.
El Dumbo de Burton es una cinta que debía cumplir con varios requerimientos para poder ser clasificada como tal y, por lo que podrá ver, cumplió con varios: hay fantasía, es un poco oscura, los personajes son algo excéntricos y la fotografía y escenografía están exquisitamente cuidadas.
El filme cuenta la historia de Holt Farrier (Colin Farrell), un sujeto que en su pasado fue una figura circense, pero cuando tuvo que marcharse a la guerra encontró que, a su regreso, ni su vida ni él mismo eran los mismos.
La cinta comienza a tomar forma cuando Max Medici (Danny DeVito), el dueño de un circo, lo contrata para hacerse cargo de un elefante recién nacido que tiene unas orejas enormes y por las cuales es el hazmerreír de todo mundo.
Muy pronto el talento oculto que el pequeño paquidermo posee dejará maravillados a todos ahí en el circo, aunque también llamará la atención de empresarios sin escrúpulos, como un tal V. A. Vandevere (Michael Keaton), quien harán de todo por adueñarse de él.
El talento del que se hace mención arriba consiste en la habilidad para volar, lo cual el elefante consigue gracias al par de enormes orejas que tiene a los costados de su gran cabeza. Es este don el que muy pronto se convierte, como era de esperarse, en la mayor atracción del show.
Quienes hacen el descubrimiento (y ayudan a desarrollarlo) son Milly y Joe (Nico Parker y Finley Hobbins, respectivamente), el par de hijos pequeños de Holt (Farrell), quienes de inmediato se sienten identificados con el carismático animal y con quien crean un poderoso lazo de amistad y lealtad que los ayudará a superar importantes pruebas.
Completan el elenco la hermosa Eva Green (Colette Marchant), Alan Arkin (J. Griffin Remington), Roshan Seth (Pramesh Singh) y el actor y mago español Miguel Muñoz Segura como Iván the Wonderful.