La mañana del viernes 18 de septiembre, Salvador Valenzuela Carrizoza sucumbió ante los daños sufridos por la explosión de la pipa de diesel que conducía el domingo 13 de septiembre en Sonora. Tenía 29 años. Su esposa, Vanessa Mariles, empleada del Condado Pima, agradece las oraciones y apoyo de los tucsonenses.
"Quiero expresar mi más sincera gratitud por todas las oraciones que he recibido. También quiero expresar mi agradecimiento por la generosidad de todos", escribió Mariles en la cuenta de Go Fund Me donde se recaudaban recursos para el traslado en helicóptero de Valenzuela desde Hermosillo a Tucsón.
Mariles y Valenzuela estuvieron juntos por varios años y tuvieron una hija de ahora 1 año y medio. Sin embargo, sería hasta el mes de octubre que se casarían, según lo planeado, para poder disfrutar de su familia juntos en Tucsón. Tras el accidente, Mariles y Valenzuela se casaron de urgencia en el Hospital General de Hermosillo hace unos días.
"Mi querido esposo Sal era un luchador y un alma amorosa. Sé que tenía la voluntad de sobrevivir y luchó duro cada segundo estos últimos días por mí y nuestra hija. Pero su cuerpo estaba cansado y débil y ya no podía luchar. Estaba listo para ser transportado a Tucsón mañana", escribió Mariles. "Sin embargo, Dios tenía otro plan para él. Ahora está libre de dolor y es nuestro ángel de la guarda. Lo extrañaremos inmensamente. Por favor, continúen orando pidiendo fortaleza para nosotros".
La pipa que Valenzuela conducía es propiedad de la compañía Grupo Moncar del Desierto, pero hasta el momento la familia no tiene claridad de si la empresa asumirá los gastos, debido a que la causa de la explosión aún está bajo investigación, dijo el miércoles un portavoz de la familia.
Valenzuela fue rescatado de entre las llamas por un desconocido que pasaba por la escena del accidente entre Caborca y Puerto Peñasco el domingo por la tarde. El jueves 17 fue sometido a una cirugía en Hermosillo para reconstruirle las venas de los brazos, que tras la explosión habían quedado rotas, impidiendo la circulación de la sangre.
En la cuenta de Go Fund Me, amigos, familiares y personas de la comunidad que no conocían a Valenzuela ni a su esposa reunieron hasta este viernes más de 10,000 dólares. Mariles dijo que el dinero su utilizará en los servicios funerarios de su esposo.
"Estoy muy agradecida por el amor, el apoyo y la amabilidad de todos", escribió Mariles. "Continúen siendo amables los unos con los otros y difundan el amor. Por favor, sepan que devolveré su amabilidad".
Salvador Valenzuela y su hija de 1 año. La esposa de Salvador, Vanessa Mariles, de Tucsón, pide ayuda para trasladar en helicóptero a su marido desde Hermosillo, luego de que el domingo estallara la pipa que Valenzuela conducía cerca de Caborca.
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