Nota del editor: La Fundación Estadounidense para la Prevención del Suicidio tiene pautas a seguir para los periodistas que informan sobre el suicidio a fin de evitar que los lectores puedan tener pensamientos suicidas. La Estrella de Tucsón siguió estas pautas de cerca. Si experimenta sentimientos suicidas después de leerlo, comuníquese con la Línea Nacional de Prevención del Suicidio las 24 horas del día llamando al 1-800-273-8255 o enviando un mensaje de texto con la palabra TALK al 741741 para comunicarse con un consejero de crisis capacitado.
En una parada de descanso en una carretera al norte de Tucsón, Alex Sanov convirtió a sus seres queridos en miembros de un club al que nadie quiere pertenecer.
Nueve días después de ser dado de alta de un hospital psiquiátrico, una estadía que parecía haberle haecho mucho bien, el estudiante de 21 años de la Universidad de Arizona entró en una tienda de armas en el centro de la ciudad y salió con el arma de fuego que usaría para su suicidio.
Al detenerse en su departamento cercano el 3 de octubre, dejó el recibo de su compra de $260 en la mesa de la cocina y luego inició su último viaje.
Una hora después, su corta vida había terminado.
Los padres y amigos creen que Sanov, quien se graduó en 2017 de Catalina Foothills High School, podría haberse salvado si no hubiera sido por una ley de armas de Arizona que permite la compra de armas de fuego el mismo día.
Todo lo que se requiere en un comercio con licencia de armas es una verificación de antecedentes federal, que Sanov habría pasado, porque no tenía antecedentes penales y nunca había sido internado de forma forzada para recibir tratamiento. En cambio, él buscó voluntariamente atención psiquiátrica.
“Era un hombre amable, inteligente y muy amado, y su vida se vio truncada por un evento que tenía el potencial de ser prevenido”, dijo la estudiante de UA Claire LeWallen, de 21 años, amiga cercana de Sanov desde sus días en la banda de su high school.
Alex Sanov, egresado en 2017 de Catalina Foothills High School, se suicidó el 3 de octubre en un descanso en la carretera cerca de Tucsón.
Dieciocho estados prohíben la venta de armas en el mismo día de algunos o todos los tipos de armas de fuego, ya sea al tener un periodo de espera específico o al tener un proceso de aprobación de permisos que logran lo mismo, según Giffords, una organización de seguridad de armas dirigida por la ex representante de EE. UU. Gabrielle Giffords, quien recibió un disparo en la cabeza durante un tiroteo masivo en Tucsón en 2011. Los periodos de espera generalmente varían de tres a siete días, aunque Hawái tiene un periodo de espera de 14 días.
Es una medida que puede prevenir algunos suicidios con armas de fuego, según la cantidad limitada de investigación que existe hasta la fecha.
En Arizona, calificado como el estado más amigable con las armas de Estados Unidos durante los últimos ocho años consecutivos por la revista Guns & Ammo, este es un cambio que la Legislatura nunca ha considerado.
La reputación del estado como un paraíso para los amantes de las armas se debe en gran parte a un grupo cofundado en Tucsón y dedicado a mantener las nuevas leyes de seguridad de armas fuera de los libros.
Uno de sus fundadores predice que nunca se adoptará un periodo de espera para la compra de armas en Arizona.
"Esa es su elección”
Las vidas perdidas por suicidio no son tan importantes como el derecho de la gente a comprar armas de fuego con prontitud, dijo Charles Heller, cofundador y portavoz de la Liga de Defensa de los Ciudadanos de Arizona, durante años la voz más influyente sobre los derechos de armas en el Capitolio estatal.
“No dices: ‘Bueno, algunas personas más podrían suicidarse, así que vamos a infringir los derechos de todos’”, dijo Heller, presentador de un programa de entrevistas de radio en AM que a menudo habla sobre el derecho a portar armas.
“Si alguien se suicida, esa es su elección”, dijo Heller, aunque los expertos dicen que el pensamiento racional se ve afectado durante un intento de suicidio.
La Fundación Estadounidense para la Prevención del Suicidio dice que el suicidio “está relacionado con las funciones cerebrales que afectan la toma de decisiones y el control del comportamiento, lo que dificulta que las personas encuentren soluciones positivas”.
El grupo de Heller, fundado en 2005, reclama 63 victorias legislativas en los últimos 15 años que expandieron el uso y la disponibilidad de armas de fuego o impidieron que las nuevas restricciones propuestas se convirtieran en ley.
Trastornos como la depresión y la ansiedad aumentan a más del doble durante una crisis. Sin embargo, para la comunidad latina reconocer que necesitamos ayuda implica romper con un tabú.
En los últimos años, por ejemplo, el sitio web del grupo dice que luchó con éxito contra un límite de compra propuesto de un arma al mes, una multa civil propuesta por el almacenamiento inseguro de armas de fuego y una propuesta de prohibición para los aceleradores de disparos (bump stocks), que pueden convertir las armas normales en el equivalente de ametralladoras -el mismo dispositivo que usó un hombre para disparar a cientos de personas en un festival de música country de Las Vegas en 2017.
Heller dijo que el mayor logro de su grupo de armas fue un cambio que convirtió a Arizona en uno de los 15 estados donde cualquier persona con la edad suficiente para comprar legalmente un arma de fuego pueda llevarla en público, cargada y oculta, sin un permiso.
Preocupación creciente
Heller dijo que la industria de las armas está haciendo un esfuerzo por combatir el problema del suicidio.
En 2017, la National Shooting Sports Foundation (Fundación Nacional de Deportes de Tiro), una asociación comercial de la industria de armas de fuego, desarrolló un kit de prevención del suicidio para minoristas de armas y campos de tiro para ayudar a su personal a identificar mejor a los clientes en riesgo y señalarles recursos para la prevención del suicidio.
No está claro si tales medidas estaban vigentes en la tienda de armas de Tucsón donde Sanov hizo su compra el 3 de octubre. El gerente de la tienda no quiso comentar.
El esfuerzo voluntario de la industria de las armas se está desarrollando a medida que la investigación muestra un creciente apoyo público a leyes de armas más estrictas.
Una encuesta realizada el año pasado por el Pew Research Center encontró un aumento de 8 puntos porcentuales en el apoyo público de 2017 a 2019, un periodo en el que ocurrieron tiroteos masivos de alto perfil en un Walmart de El Paso, una sinagoga en Pittsburgh y una escuela secundaria en Parkland, Florida, así como en Las Vegas.
“La proporción de demócratas que apoyan leyes de armas más estrictas ha aumentado 11 puntos porcentuales desde 2017, mientras que ha habido un aumento de 7 puntos en el apoyo entre los republicanos”, encontró el Pew Center.
”Siempre bromeando”
Cuando era niño, Sanov era feliz y extrovertido y asistía a un programa para estudiantes dotados de primero a cuarto grado en la escuela primaria Lineweaver, dijo su madre, Nina Primm.
Pero para sexto grado ya estaba viendo a un terapeuta por depresión y ansiedad severas.
Siguieron años de visitas al médico y medicamentos, con diversos grados de eficacia a largo plazo. Se cambiaron los diagnósticos, más recientemente a enfermedad bipolar, dijo su madre.
Buscar ayuda pudiera prevenir serias consecuencias para las personas que enfrentan ansiedad, depresión y otros problemas de salud mental.
LeWallen, la amiga de la preparatoria de Sanov, dijo que “parecía un tipo feliz y divertido, siempre bromeando y tratando de hacer reír a la gente”, una tendencia que ella cree que desarrolló para enmascarar sus sentimientos de tristeza.
En privado, dijo, Sanov se reprendía a sí mismo por estar deprimido a pesar de sus ventajas en la vida, como el tener padres cariñosos y la oportunidad de una educación universitaria.
“Sabía que era afortunado”, dijo. “Y eso lo hacía sentir aún peor”.
Primm dijo que su hijo, a pesar de sus desafíos, tenía un espíritu generoso. Ella señaló su decisión, a los 17 años, de registrarse como donante de órganos cuando obtuvo su licencia de conducir.
Cuatro personas que necesitaban trasplantes recibieron los órganos de Sanov, dijeron sus padres, el único pequeño consuelo que sienten mientras lamentan su pérdida.
El padre de Sanov, Andrei Sanov, profesor de química de la UA, dijo que su hijo parecía estar bien después de su reciente estadía de cinco días en el hospital psiquiátrico Palo Verde.
“Parecía estar bien; estaba realmente optimista”, dijo Sanov, quien calificó la muerte de su hijo como “incomprensible”.
“Lo que realmente duele es que, de niño, siempre odió las armas”, agregó.
Investigación limitada
El año pasado, 253 personas se suicidaron en el Condado Pima. Como Sanov, muchos eran hombres jóvenes que usaban un arma de fuego, según el médico forense del Condado Pima.
“Las víctimas de suicidio fueron con mayor frecuencia hombres (79%), de entre 20 y 29 años (22%) y murieron como resultado de armas de fuego (58%), dijo el informe anual del médico forense para 2019.
A nivel nacional, más de 24,000 personas murieron en suicidios con armas de fuego en 2018, según los datos federales más recientes disponibles del Centro Nacional de Estadísticas de Salud. El suicidio fue la segunda causa principal de muerte en Estados Unidos, después de los accidentes, entre las personas de 10 a 34 años en 2018, según muestran los datos del Instituto Nacional de Salud Mental.
Hasta hace poco, se hacía poca investigación sobre la violencia armada, porque el gobierno federal no la financiaba, dicen los expertos.
“El progreso científico en la comprensión de cómo abordar este problema ha sido limitado en parte debido al financiamiento limitado de la investigación, que a su vez se debe en gran parte a la política en torno a las armas en Estados Unidos”. El profesor de la Universidad de Chicago Jens Ludwig, quien ha publicado estudios sobre los costos económicos de la violencia armada, lo escribió en un artículo de 2017 en Proceedings of the National Academy of Sciences (Procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias).
Un estudio de investigación de 2017 encontró que los asesinatos con armas de fuego disminuyeron en un 17% y las tasas de suicidio en un 7% a 11% en los estados con periodos de reflexión para la compra de armas de fuego. Otro estudio de ese año encontró una disminución menor del 2% al 5%.
Sin segundas oportunidades
Las causas del suicidio son complejas y, a menudo, no se deben a un solo factor, dicen los investigadores.
Alrededor del 90% de las personas que intentan suicidarse por medios distintos a las armas de fuego sobreviven al intento, ya sea porque lo reconsideran o porque alguien intervino, y no lo vuelven a intentar, según muestran los estudios.
“La mayoría de los intentos no son fatales y la mayoría de las personas que intentan suicidarse no mueren en un suicidio futuro”, dijo un estudio de 2020 de la escuela de medicina de la Universidad de Stanford.
Pero los intentos realizados con una pistola son casi siempre fatales.
La pandemia podría destruir años de progreso en la creación de equidad en el acceso universitario para las poblaciones que carecen de representación, como son los estudiantes latinos y de primera generación.
“Que un intento de suicidio sea fatal depende en gran medida de la letalidad del método utilizado, y las armas de fuego son extremadamente letales”, dijo el informe de Stanford, que también detectó un “riesgo de suicidio dramáticamente elevado” para los propietarios de armas en general, especialmente las mujeres.
Los hombres propietarios de armas tienen ocho veces más probabilidades que los no propietarios de morir por disparos autoinfligidos, y las mujeres propietarias de armas tienen 35 veces más probabilidades, encontró el estudio.
”Como goteo de agua sobre una roca”
El Dr. Randall Friese, el cirujano de trauma de la UA que operó a Giffords y otras víctimas del tiroteo masivo de 2011, fue elegido miembro de la Legislatura en 2014, un trabajo que dice haber buscado en gran parte para impulsar una mejor seguridad en relación a las armas.
Hasta ahora, ha sido una batalla cuesta arriba, pero hay señales de que esto puede estar comenzando a cambiar, dijo el representante del Distrito 9.
Friese describió a la Liga de Defensa de los Ciudadanos de Arizona como “un grupo pequeño y muy vocal” que ha “tenido mucha influencia” en la Legislatura estatal dominada por los republicanos. Heller, el cofundador, dijo que el grupo de armas tiene 18,000 miembros que pagan y contratan a dos cabilderos para interactuar con los legisladores.
Friese dijo que los cabilderos a menudo logran silenciar las propuestas de seguridad de las armas antes de que lleguen a la etapa de audiencia, lo que evita el debate público y evita que los legisladores tengan que tomar posiciones sobre medidas potencialmente controvertidas.
Pero el año pasado, Friese dijo que sucedió algo que lo sorprendió.
Cuando un legislador republicano propuso legalizar el transporte de un arma cargada en los terrenos de las escuelas, incluso algunos compañeros republicanos se resistieron y la rechazaron, dijo.
Él predice que las leyes de seguridad de armas se fortalecerán poco a poco.
“Si no tuviera esperanza, no volvería”, dijo Friese.
“Somos como agua que gotea sobre una roca”, dijo sobre el movimiento de seguridad de las armas.
“Va a llevar tiempo, pero eventualmente lograremos el cambio”.
